Grecia ha pagado este jueves al Fondo Monetario Internacional (FMI) 460 millones de euros correspondientes al tramo del préstamo que debe abonar a este organismo en abril. El pago se hará efectivo a las tres de la tarde (hora española), coincidiendo con la apertura de los bancos en Nueva York. El próximo tramo que Grecia tiene que abonar a este organismo es de 747 millones de euros y vence el 12 de mayo.
El pago coincide con la visita del primer ministro griego, Alexis Tsipras, a Rusia, donde hoy ha asegurado que el objetivo de Grecia es permanecer en la eurozona y se ha mostrado optimista sobre las posibilidades de un acuerdo exitoso con la Unión Europea. "Queremos cerrar un acuerdo con la Unión Europea que sea beneficioso para Europa y para nosotros... El objetivo de nuestro Gobierno es que Grecia permanezca en la eurozona", aseguró Tsipras en una clase magistral ofrecida en el Instituto de Relaciones Internacionales de Moscú, un día después de reunirse con el presidente ruso, Vladímir Putin.
Tsipras es optimista tanto sobre la superación de la crisis económica, como sobre la recuperación de las pérdidas ocasionadas
Grecia subastará en mayo Letras del Tesoro a tres y seis meses para sustituir emisiones anteriores por valor de 1.400 millones de euros cada una. Y el próximo día 15, debe afrontar el pago de 500 millones de euros en salarios y pensiones y realizar una nueva emisión de Letras del Tesoro a tres meses por valor de 1.000 de euros.
Dificultades de financiación
El país colocó ayer 1.138 millones de euros en Letras a seis meses a un tipo de interés del 2,97 %, con lo que sustituirá títulos por valor de 1.400 millones de euros, que vencen la próxima semana. Esta emisión tenía especial importancia ya que era la primera tras la decisión del Banco Central Europeo (BCE) de no permitir a los cuatro bancos sistémicos griegos aumentar su exposición en Letras del Tesoro.
Además, la retirada de los inversores extranjeros de las subastas desde el pasado enero dificulta las operaciones de financiación de la economía helena. La orden del BCE que en febrero decidió dejar de aceptar los bonos helenos como garantía en sus operaciones de refinanciación ordinarias, como las subastas semanales, agravó la escasez de liquidez de las arcas estatales que desde entonces ha ido en aumento. Ahora los bancos griegos pueden conseguir financiación a través del Banco de Grecia aunque al 1,55%, mucho más cara que la que ofrece actualmente el BCE al 0,05%.
Las necesidades de financiación no han sido concretadas por Tsipras, que continúa las negociaciones con Bruselas para perfilar las reformas que debe aplicar y que permitan lograr un acuerdo para recibir 7.200 millones pendientes del segundo rescate. Desde Moscú, el primer ministro se declaró optimista no solo en cuanto a la superación de la crisis, sino también en lo que se refiere a la recuperación de las pérdidas que ha ocasionado.
