Los bancos hacen números por las inundaciones concentradas en Valencia. Los equipos financieros activaron los protocolos de crisis para cuantificar su exposición al desastre provocado por la DANA y ya dan por hecho que contabilizarán en el cuatro trimestre del año pérdidas de créditos millonarios a pymes que serán imposibles de recuperar, según distintas fuentes financieras consultadas por Vozpópuli.
Las ayudas del Gobierno a los afectados amortiguarán el golpe y lo alejará de la exposición de unos 20.000 millones de euros entre hipotecas y préstamos a empresas que estimó el Banco de España para el conjunto del sistema bancario.
CaixaBank, Sabadell, Santander y BBVA son los bancos más expuestos a las zonas declaradas catastróficas tras la DANA. “Se han hecho análisis exhaustivos tras el desastre y ya se asume que habrá negocios perdidos. Va a haber pérdidas”, admiten fuentes próximas a uno de los grandes bancos del Ibex. Eso sí, como coinciden distintas fuentes financieras, serán limitadas.
El Gobierno ha desplegado un plan de ayudas de 14.400 millones para los afectados de la DANA. De este importe, la partida más cuantiosa es la destinada a la línea de avales de 5.000 millones para la reconstrucción, que tendrán el aval del Estado y gestionará el ICO.
CaixaBank tiene una cuota de alrededor del 30% en las zonas afectadas, mientras que el Sabadell de entre el 15% y el 20%"
Ya se ha habilitado un primer tramo de 1.000 millones bajo dos modalidades. La primera permite adelantar el cobro para dotar de liquidez a hogares o empresas localizadas en los municipios afectados, mientras que la segunda de ellas contempla préstamos a empresas y autónomos que necesiten financiación para restaurar y desarrollar su actividad.
Pymes afectadas
También, en acuerdo con la banca, Moncloa ha impulsado la suspensión del pago de hipotecas y créditos al consumo , con lo que se podrán aplazar el pago de capital y de intereses durante tres meses, con posibilidad de extenderlo otros nueve meses pero haciendo frente al pago de los intereses. Como medida adicional, el Gobierno aprovechó para extender otro año más, hasta noviembre de 2025, el código de buenas prácticas que permite este tipo de moratoria para los hogares considerados vulnerables.
CaixaBank tiene una cuota que supera el 30% en la provincia de Valencia, según fuentes financieras, mientras que en el Sabadell oscila entre el 15% y el 20%. Estas dos entidades serían las más expuestas al desastre de la DANA. Mientras, el Santander y BBVA cuentan con alrededor de la misma porción que concentran en España, del entorno del 18% y del 14%, respectivamente.
El decreto ley evita que los afectados que se acojan a moratorias sean catalogados de morosos, lo que les complicaría poder financiarse en el futuro"
Según el Banco de España, la exposición de los bancos se reparte entre 13.000 millones a préstamos a hogares y otros 7.200 millones en financiación a empresas, sobre todo pymes. En concreto, se calcula que hay 23.000 empresas domiciliadas en las zonas más afectadas por la DANA y unos 150.000 titulares de hipotecas.
Moratorias para evitar provisiones
Una de las claves para evitar el impacto en las cuentas de los bancos serán las moratorias hipotecarias. Como ya ocurrió en noviembre de 2022 con el acuerdo para proteger a los hipotecados del rally de los tipos de interés, los bancos han pactado con el Gobierno la suspensión del pago de las cuotas hipotecarias para los afectados de la DANA. Esta medida, aprobada por decreto ley, exime a los bancos de aplicar la contabilidad financiera y tener que destinar provisiones para este tipo de créditos que habrían engrosado la factura a las pérdidas irrecuperables, como ponen de manifiesto desde uno de los grandes bancos del Ibex.
Al tratarse de moratorias legales, como se denominan en el argot financiero, la normativa no exige hacer dotaciones y tampoco catalogar a los hipotecados, en este caso los afectados por la DANA, como morosos. Este último punto, como advierten fuentes financieras, es crucial para los hipotecados, porque de entrar en la categoría de deudores dudosos automáticamente tendrían más complicaciones a la hora de pedir nuevos créditos al banco.