El plan estrella que lidera Teresa Ribera para bajar la luz, el ya famoso límite al gas, se ha estrenado esta semana con ciertas dudas. El mercado encadenó tres días de subidas, en las primeras tres jornadas, y llegó a alcanzar los mayores precios máximos del mes de junio. El Gobierno espera que, con unas condiciones meteorológicas más favorables, su plan consiga recortar la tarifa eléctrica en cerca de un 15%. Si no lo consigue, su medida puede autodestruirse en cualquier momento, tal y como recoge el real decreto.
La disposición adicional segunda del mecanismo de ajuste de costes de producción para la reducción del precio de la electricidad en el mercado mayorista habla de la posibilidad de suspender el plan si sale mal. “Mediante acuerdo del Consejo de Ministros y con la conformidad previa del Gobierno portugués, se podrá suspender temporal o definitivamente la aplicación del mecanismo regulado en este real decreto-ley, cuando así se justifique por circunstancias excepcionales del mercado o por razones de interés general”, recoge esta medida.
Una opción que aparece de forma idéntica en la normativa portuguesa. La suspensión de la medida, por parte de cualquiera de los dos países, desmontaría el objetivo de esta ‘excepción ibérica’ y provocaría “un gran lío”, tal y como definen a Vozpópuli desde el mercado. Por lo tanto, se interpreta que en el caso de que alguno de los países reclame esta suspensión, la medida desaparecería del mercado ibérico
Un arranque complicado
Los expertos ven todavía prematuro afirmar si la medida para aliviar los precios de la luz ha fracasado o no. “Naturalmente, es muy pronto para evaluar una medida diseñada para tener efectos a lo largo de un año basándonos tan solo en una reducción de precios del entorno del 5% o 6% frente a un escenario contrafactual en los primeros días de la medida”, explica Diego Rodríguez, investigador asociado de Fedea y experto energético.
“Cabe esperar que, aunque no se alcance la reducción inicialmente prevista del 15% o 20% de la factura, el mecanismo sí genere reducciones mayores a las observadas inicialmente. Pero no nos olvidemos que el mecanismo tiene otros efectos, tanto a corto como a largo plazo, que pueden también haberse infravalorado y que han sido señalados con anterioridad”, añade.
Por su parte, los analistas de Grupo ASE, una vez pase esta ola de calor, es de esperar que en las próximas semanas el volumen de producción de los ciclos combinados de gas se reduzca ostensiblemente y recupere sus niveles habituales. En paralelo, el volumen del ajuste de la compensación también descendería.
Respecto al precio del gas, alertan de que el mercado está sufriendo una elevada volatilidad e incertidumbre, que puede que se mantengan y eleven las previsiones iniciales del ajuste por compensación. Así mismo, los analistas de Grupo ASE indican que la reducción de los precios de electricidad a través de este mecanismo se va a ver afectada por multitud de factores.
Luz más barata en los futuros
Los precios futuros de la luz dan esperanzas al plan de Ribera. Para el cuarto trimestre de 2022, los agentes ya pueden comprar electricidad en la Península Ibérica a 160 euros/MWh, mientras que en Francia el precio se eleva a 578 euros/MWh y en Alemania a 324 euros/MWh.
“Esta gran diferencia de precios entre el mercado mayorista ibérico y los demás beneficia a todos los consumidores españoles y portugueses, tanto a los que tienen contratos indexados al mercado como a los que tienen contratos a precios fijos, porque éstos toman los precios del mercado como referencia”, defienden desde el Ministerio para la Transición Ecológica.
La mayor diferencia de precios futuros de la luz se produce en noviembre y diciembre. Los últimos meses se registrará en España y Portugal precios de Península Ibérica el precio de referencia es de 165 euros frente a los 668 euros/MWh de Francia y los 338 euros/MWh de Alemania. Unos datos que avalarían el plan y que lo deja lejos de autodestruirse.
Sin_Perdon
Que magníficos gestores tenemos. Se aprecia que en 2021 se pagó la luz mucho más cara que en 2020, y en 2022 muchísimo más que en 2021. De hecho desde el verano del 2021 el precio está disparado. Nuestro gobierno, que tanto trabajo y tanto se preocupa por nuestro bienestar ha estado sesteando, sin aportar medida alguna e intoxicando a la población con medidas fantasmagóricas como "crear una empresa pública". Como que no tuvimos ya a Endesa y los precios eran similares al resto. Pero hay que ver, que para una vez que se ponen a currar y resulta que, de un 40% que iba a bajar, después se iba a quedar en un 20%, después entre el 15-20%,... Y ahora incluso supone una subida y esa bajada "se producirá a lo largo del año". O no. O sea, humo, humo, humo y los precios DE TODO disparados. Y el gobierno ideando nuevos impuestos para encarecer aún más el combustible y la energía. ¿Se puede hacer peor?. Hasta ZP se piró antes de empeorarlo más.