El Gobierno es claramente partidario de que los clientes de participaciones preferentes se acojan al procedimiento arbitral de consumo. Desde los altos estamentos oficiales consideran que no solo es una vía alternativa a la judicial plenamente válida sino que también es más rápida y barata. Aunque no lo dicen con rotundidad, consideran que es un procedimiento mejor que apelar a los tribunales y así lo aconsejan en todos los foros que pueden.
Para empezar, es más rápido, ya que establece un periodo máximo de seis meses desde el inicio del procedimiento arbitral, evitando la dilación habitual de los procedimientos judiciales y el sistema de recursos procesales.
Por otro lado, es gratuito, ya que el arbitraje no aplica tasas para el acceso como los tribubales y no exige abogado ni procurador.
Además, es claramente más sencillo. En el caso de Bankia, se puede reclamar el arbitraje en las propias oficinas de la entidad.
Renuncia
Es preciso subrayar que la solicitud de sometimiento al procedimiento arbitral implica la renuncia al inicio de otras acciones, incluidas los procedimientos ordinarios en vía judicial. Solo podrían ser anuladas las decisiones por causas procedimentales muy tasadas.
Este procedimiento ya se ha probado en los arbitrajes de Novacaixagalicia y CatalunyaBanc, y sigue abierto.
Mañana, el ministro Luis de Guindos dará explicaciones en el Congreso sobre la crisis de las preferentes.
