Los sindicatos exhiben músculo y reúnen a 1.500 negociadores en convenios en los que no van a firmar mientras la patronal no plantee subidas ligadas al IPC. Delante del Museo Reina Sofía de Madrid, estos negociadores llaman a tensionar las negociaciones. "Es muy cínico decir que no se puede hacer el acuerdo salarial. No es de recibo la posición de la patronal. Ante el egoísmo y la avaricia de CEOE, necesitamos responsabilidad, ser corresponsables con la situación", ha destacado Unai Sordo, secretario general de CCOO.
Sordo ha llamado al Gobierno ha actuar en este punto. La acción que propone es que plantee una subida de impuestos a las empresas, en concreto, la imposición de un tipo mínimo en el Impuesto sobre Sociedades más exigente.
En la misma línea se ha pronunciado Pepe Álvarez, secretario general de UGT, que ha subrayado: "Estamos en la batalla salarial. O hay subida de salarios, o hay conflicto", ha planteado. A su juicio, "desde 2008, los salarios están prácticamente congelados". Álvarez ha reivindicado la "lucha por el SMI" y ha advertido de que "los 1.000 euros deben seguir subiendo el año que viene". El secretario general de UGT cree que "la crisis parece que sólo afecta a algunos" y sostiene que "además de los beneficios del Ibex 35, que han tenido un récord, las pymes tienen también beneficios importantísimos, y los altos directivos están aumentando sus salarios".
Álvarez ha llamado a la huelga: "En junio y julio lo podemos hacer, pero en septiembre lo vamos a hacer", ha avisado.
Este acto se ha convocado después de que la mesa de negociación de la subida salarial en convenio fracasara el pasado 5 de mayo. El 8 de abril, los secretarios generales de las patronales en CEOE rechazaron la última propuesta de los sindicatos, que suponía una subida del 3,4% en 2022, 2,5% en 2023 y 2% en 2024, con cláusulas de revisión del 50%. A su vez, la patronal ofreció una subida salarial del 8%, muy similar, pero sin cláusula de revisión. Los sindicatos ya avisaron de conflictividad y de movilizaciones desde antes del verano.
Convenios en conflicto
Los negociadores han ido desgranando los convenios en conflicto. Así, han mencionado los de asistencia y educación infantil estatal, servicio de atención a personas con discapacidad, del campo de Extremadura, del metal (Barcelona, Álava y Cantabria), el manipulado de frutas y hortalizas de Granada, el plástico de Valencia, el de dependencia estatal, el de administración de fincas de Asturias, el de limpieza Castilla y León, el de ayuda a domicilio de Galicia, y el de limpieza de edificios y locales de Huesca,
También han aludido al de logística de Guadalajara, el estatal de instalaciones deportivas y gimnasios, el del transporte regulador de viajeros de Baleares, el de aparcamientos de Burgos, el de servicios y prestación ajenas estatal, el de consultoría, contact center, hostelería y hospedaje de Madrid, y hostelería, comercio y alimentación en Cantabria, así como el de supermercados Castellón, Castilla y León y Valencia.
Asimismo, se han pronunciado "en defensa de los empleados públicos" y le han exigido "a Hacienda una convocatoria inmediata de la mesa de negociación", y han recordado las reivindicaciones del servicio público postal y del personal laboral de servicio en el exterior,
Según algunos de los negociadores que han hablado, en los países de nuestro entorno, los salarios suben con los precios, para lo que han puesto de ejemplo a Alemania y Francia, y han exigido cláusulas de garantía salarial retroactivas.
Birmania
Estos parásitos comegambas, preocupados solo por su bienestar, son repugnantes.