Le crecen los enanos a Emilio Saracho. El nuevo presidente de Banco Popular va a tener que negociar una posible venta de la entidad con la cotización cerca de mínimos históricos. Una vez más, el banco sufrió este lunes el mayor desplome del Ibex, del 6,25%, cerrando en 0,7 euros por acción.
Este descalabro bursátil llega en el peor momento para Saracho, con la conclusión de la primera fase de su posible venta. Tras un trabajo intensivo durante los últimos días, de análisis del data room, los bancos interesados tienen que presentar este martes sus ofertas no vinculantes, según fuentes financieras consultadas por este medio.
Las entidades han tenido casi dos semanas para escrutar todos los detalles del balance del Popular. Y durante este periodo la cotización del banco había recuperado fortaleza hasta situarse el pasado miércoles en 0,84 euros. Sin embargo, las dudas regresaron al parqué de nuevo el jueves y desde entonces ha caído día a día hasta situarse en 0,7 euros, de la mano de todo tipo de rumores en torno a la entidad.
Este nivel es similar al que alcanzó Popular poco antes de la anterior subasta que vivió, a finales de noviembre, en la que estuvo cerca de integrarse en BBVA. Entonces llegó a cotizar en 0,77 euros, y la entidad presidida por Francisco González ofreció 1,35 euros.
El escenario era positivo para Saracho hasta que el pasado jueves volvieron las dudas al mercado y desde entonces el banco ha perdido ya un 18% en bolsa
Pero el entorno ha cambiado. Aparte de que la cotización está más baja, hay riesgo de que haya demandas de accionistas, por lo que las entidades están planteando la posibilidad de que haya garantías estatales. Y sigue en el aire el agujero inmobiliario de la entidad, para lo que el equipo gestor está haciendo 40.000 tasaciones y que sus competidores tasan en entre 6.000 y 8.000 millones de euros.
Hay tres candidatos en todas las quinielas para poner ofertas en este primer corte. Los que parten con ventaja son BBVA, que ya fue el más interesado a finales del año pasado, y Banco Santander. Aunque también suena con cada vez más insistencia Bankia, a pesar de la dificultades legales (hasta dentro de un mes y medio no puede comprar nada) y operativas (está en marcha la fusión con BMN).
Los registros de la CNMV muestran como tres fondos especulativos (hedge fund) incrementaron sus posiciones bajistas la semana pasada: Samlyn Capital, cuya apuesta bajista pasó del 1,51% al 1,6%; Marshall Wace, que elevó su posición corta del 1,97% al 2,02%; y Lansdowne, que la incrementó del 0,86%% al 0,9%. Mientras, AQR la recortó del 1,04% al 0,99%.
Especuladores
La apuesta más llamativa es la de Lansdowne, un hedge fund creado por un empresario y filántropo londinense, Paul Rudock, que irrumpió en el capital de Popular poco antes de que llegara Saracho, y desde entonces no ha parado de incrementar su apuesta bajista.
Tanto Lansdowne, como Samlyn y Marshall Wace ya han rentabilizado sus nuevas apuestas bajistas. Aun así, las posiciones agregadas que ofrece la CNMV muestran que las posiciones bajistas se han relajado relativamente en las últimas dos semanas.
