El Real Madrid, el único de los grandes clubes de fútbol que no tenía división femenina hasta la actual temporada (en la que ha decidido estrenar equipo), mueve entre 700 y 800 millones de euros anuales. Una cifra de facturación anual que el deporte femenino mundial alcanzará "en los próximos años", según una proyección de Deloitte.
De acuerdo a la consultora, una de las 'big four', el negocio del deporte femenino crece ya más rápido en términos porcentuales que el masculino pero desde cantidades considerablemente inferiores.
Sin ir más lejos, se estima que el fútbol femenino mueve en España unos diez millones de euros, por los 4.000 millones del masculino. Las distancias se recortan considerablemente en el baloncesto: los equipos masculinos que más generan ingresan entre 10 y 20 millones anuales, frente al millón de euros que facturan los equipos de baloncesto femeninos más importantes.
Es de notar también, por ejemplo, que el equipo que más facturaba antes de la covid, el Barça, invierte actualmente en su equipo de baloncesto masculino tres veces más de lo que genera. Para su división de fútbol femenino, apuesta el doble de lo que ingresa.
En la mejor previsión, el deporte femenino facturaría apenas un 0,2% de lo que mueve el deporte masculino al cabo de 2021
En cualquier caso, Deloitte proyecta que el negocio del conjunto de todos los deportes femeninos acabará 2021 todavía lejos de los 1.000 millones de dólares de facturación anual.
La cifra se acercaría a lo que facturó el Real Madrid la pasada temporada, pero no dejaría de ser apenas un 0,2% de lo que mueve el deporte masculino.
"Potencial inmenso" del deporte femenino
Aún así, desde Deloitte estiman que existe un potencial todavía inexplorado para las marcas. Según destaca un reciente informe de la compañía, el 66% de la audiencia a nivel internacional estaría interesada en visionar eventos de deporte femenino. Dentro de los espectadores interesados expresamente en deportes, el porcentaje alcanzaría el 84% (el 49%, mujeres).
"Los deportes femeninos apuntan hacia los 1.000 millones de dólares (822 millones de euros) y crecen más rápido que los masculinos aunque aún están por detrás de éstos", recoge el mismo informe.
Toda la industria del deporte tiene que invertir de forma continua con el fin de crear más oportunidades para que el deporte femenino demuestre su valor comercial"
"Tiene un potencial inmenso. El desafío para conseguirlo será darle una mayor cobertura en medios y cabida en grandes estadios (si las circunstancias lo permiten) de forma constante", esgrimen desde la consultora.
"De esta manera, el valor para los patrocinadores será evidente, lo cual debería aumentar a su vez el gasto en marketing y en la difusión de estos deportes. No obstante, para ello toda la industria del deporte (lo que abarca federaciones, ligas, equipos, patrocinadores y reguladores) tienen que invertir de forma continua con el fin de crear más oportunidades para que el deporte femenino demuestre su valor comercial".
"Los patrocinadores y vendedores de ropa deportiva deberían aprovechar la tremenda oportunidad que les ofrece el deporte femenino", añaden desde Deloitte.
Los cambios llevan su tiempo y puede tardarse una década o incluso una generación hasta que el deporte femenino desarrolle todo su potencial"
"Los cambios llevan su tiempo y puede tardarse una década o incluso una generación hasta que el deporte femenino desarrolle todo su potencial", señalan desde la consultora, que augura que "experimentará un auge que representará bastante más de 1.000 millones de dólares en los años venideros".
"Su promesa de generar valor para los patrocinadores, inversores, aficionados y los propios atletas y equipos toma cada vez más forma. Esperamos llegar a ver un mundo en el que el deporte femenino tenga un estatus totalmente equiparable al del deporte masculino, a todos los niveles".
Ruben
Es como decir que el lanzamiento de jabalina tiene un potencial inmenso, que sólo hay que darle cabida en los grandes estadios y en los medios de comunicación. El problema del fútbol femenino es que su público objetivo es bajísimo. No va a captar seguires del fútbol masculino, porque (aceptémoslo) el nivel es paupérrimo, y el porcentaje de mujeres a las que interesa es irrisorio. Pero vamos, cada uno tiene que vender su moto.