La hostelería mejora sus previsiones de cara al verano, pese al impacto de la inflación. Si hace un mes apuntaba a que la temporada alta le permitiría igualar los ingresos de 2019, en los últimos días la patronal hostelera ha revisado sus pronósticos apuntando a que su facturación estará "ligeramente" por encima de entonces.
En concreto, las empresas de restauración y alojamiento españolas consideran que su crecimiento puede estar en la línea del registrado en abril, cuando, gracias al efecto de la Semana Santa, el sector ingresó un 0,8% más que en el mismo periodo de 2019.
"Creemos que va a ser un muy buen verano para coger aire para el final de año, que se prevé desastroso", apuntan fuentes de la patronal Hostelería de España consultadas por Vozpópuli, que señalan que "la facturación estará por encima que en el mismo año prepandemia, pero en un nivel moderado".
El aumento de los ingresos, insisten los empresarios, no permitirá levantar de la misma forma los beneficios. "Teniendo en cuenta el alza de los costes, la ganancia para los negocios será la misma que hace tres años", aseguran desde la patronal.
La hostelería facturará el 40% del año
Se trata de la temporada más determinante para el sector de la hostelería, que este año se anotará cerca del 40% de su facturación anual solo entre los meses de junio, julio, agosto y septiembre. En total, y en base a estas previsiones, los ingresos superarán los 50.000 millones de euros en este periodo.
Según los datos aportados por la consultora The NPD Group, la restauración recuperó en España en mayo el 99% del negocio previo a la pandemia, "a pesar del contexto inflacionista y sus efectos sobre el consumo doméstico", explicaba la empresa esta semana.
Pese a ello, el contexto de inflación generalizada ya está afectando en la forma de consumir. Como explica NPD, la "sensibilidad al precio" se ha incrementado en el sector, de forma que seis de cada diez españoles afirman que la búsqueda de precios asequibles determina "en cierto modo" su elección del establecimiento para comer fuera de casa, cuatro puntos más que el año pasado y 20 puntos más que a mediados de 2020.
Para la directora de Foodservice de NPD de España, Edurne Uranga, "en cualquier caso, hoy el consumidor no percibe que la subida de precios sea especialmente fuerte en el mercado de foodservice. Estamos viendo en España una situación excepcional entre los países europeos: en nuestro país, el mayor diferencial entre el IPC de retail y de horeca es clave en la percepción final de los españoles y la mejor recuperación del sector”, apuntaba.
