Reunión del Grupo Popular del Ayuntamiento de Madrid. Interviene la alcaldesa Ana Botella. Estas reuniones son previas a la celebración del Pleno que celebra mensualmente el Ayuntamiento de Madrid y en ellas se habla de los temas que se van a debatir y se explica a los ediles la posición de voto del PP en la sesión mensual del Pleno municipal. Pero en esta ocasión, el pasado lunes, era el primer encuentro después de que Ana Botella hubiera anunciado que no se presentaría a las elecciones.
Muchos concejales están molestos con su alcaldesa porque se enteraron de que no iba a ser candidata por la prensa. Pero tampoco les ha extrañado, pues Botella en vez de romper con la política de Alberto Ruiz-Gallardón siguió con un núcleo duro y prestó poca atención a los distritos que están sin competencias y sin dinero, dice uno de sus ediles.
En la reunión Botella les dijo a sus concejales que sabía que estaban nerviosos porque se acercaban los tiempos electorales. Y les animó a trabajar hasta el último día de la legislatura. Añadió que ella "iba ser fiel hasta el final, no como otros".
Muchos ediles no comprendieron esa frase, salvo que fuera una ampliación de las quejas que Ana Botella hizo a Mariano Rajoy respecto a Esperanza Aguirre el día que le anunció al presidente del Gobierno que tiraba la toalla y no quería ser candidata. "Tenía que haber dicho nombres", explicaba otro edil de Madrid.
Dicen que Ana Botella está molesta con Esperanza Aguirre. En el acto de hace unos días de colocación de una placa a Margaret Thatcher hubo hasta dieciocho concejales y muchos de ellos se desvivieron por estar con Aguirre y se olvidaron de su alcaldesa. Actos como éste no han pasado desapercibidos para la alcaldesa que aunque no lo ha dicho, siempre se ha visto marcada por la presidenta del PP de Madrid.