El rotativo ‘El País’, diario que su editora define como el “líder mundial en español” y como “sinónimo de calidad en el campo del periodismo en el mundo hispanoamericano” se ha visto obligado a enmendar un error transatlántico, por la dimensión del fallo, similar a dichos barcos de grandes dimensiones, y por el espacio donde se desarrolla la trama del entuerto: Cuba-Venezuela- España.
El diario se disculpó este jueves tras la publicación de una fotografía en primera plana del enfermo presidente de Venezuela, Hugo Chávez, en la cama de un quirófano entubado. Antes, el ministro de Comunicación de Venezuela, Ernesto Villegas, dijo que la foto publicada por el diario español, en la que supuestamente aparecía el líder venezolano, es "tan grotesca como falsa". El Buscón, consciente de que rectificar es de sabios, aplaude las disculpas del veterano rotativo, no sin antes reflexionar sobre la causa de un suceso que llega tras un drástico recorte de plantilla que ha hecho mella en el buque insignia del grupo de comunicación Prisa.
A falta de que se ejecuten los dos únicos despidos pendientes de un ERE que afectó a 129 profesionales de ‘El País’ --proceso por el cual se vieron obligados a abandonar el barco periodistas de larga trayectoria y un quehacer a sus espaldas de rigurosa práctica periodística— el suceso de la foto falsa de Chávez denota que la descapitalización en recursos humanos ejecutada por Prisa ha hecho mella en el periódico de mayor tirada de España. Rectificar una información es mucho más sencillo que tratar de reflotar un proyecto editorial en el que su principal activo, las personas, se han ido a la calle por la ineficiente gestión de sus ejecutivos. Los corresponsales en el extranjero, como el que 'El País' tenía en la Habana no hasta hace mucho, o redactores con tablas, no pueden ser sustituidos sin más por los servicios de las agencias de noticias o becarios con sueldos precarios.
Periódicos de todo el mundo se han hecho eco del fallo, dejando en evidencia la calidad de ‘El País’ y sacando los colores a sus responsables. Entre otros cientos, los siguientes ejemplos: El Toronto Star, Times of India, Washington Post, La agencia Reuters, La BBC, The Guardian o Clarín.
