La Audiencia de Palma ha notificado este viernes la histórica sentencia del caso Nóos, por el que la infanta Cristina y su marido, Iñaki Urdangarin, estaban acusados. El marido de la hermana del Rey utilizó presuntamente el Instituto Nóos y otros organismos para conseguir fondos de instituciones públicas de Baleares, Valencia y Madrid.
La Fiscalía Anticorrupción pedía para Urdangarin una pena de 19 años y 6 meses de prisión por presuntos delitos de tráfico de influencias, malversación, prevaricación, fraude, estafa, falsedad, dos delitos contra Hacienda y blanqueo, mientras que el sindicato Manos Limpias elevaba la petición a 26 años y 6 meses de cárcel. Finalmente ha sido condenado a 6 años y 3 meses de prisión.
Por su parte, la infanta se enfrentaba a la petición de 8 años de prisión del Manos Limpias, como presunta colaboradora en los delitos fiscales de su esposo. Pero finalmente ha sido absuelta, aunque deberá abonar una multa conjunta de 265.000 euros.
El fallo se ha hecho público seis años y medio después de que el juez José Castro diera comienzo a la investigación de la presunta trama urdida por Urdangarin y su exsocio, Diego Torres. Ambos percibieron 6,1 millones de varias administraciones públicas y configuraron un plan para defraudar a Hacienda.
Los tres compartían banquillo de los acusados con otras 14 personas; entre ellas estaban el expresident balear y ex ministro Jaume Matas, o Marco Antonio Tejeiro, José Luis Ballesteros (Pepote), Gonzalo Bernal, Juan Carlos Alía y Miguel Ángel Bonet. Estas han sido sus condenas:
Diego Torres: más de 8 años
El socio de Urdangarin al frente del Instituto Nóos estaba acusado por presuntos delitos de prevaricación, fraude, tráfico de influencias, malversación, contra Hacienda, falsedad, estafa, falsificación y blanqueo. La Fiscalía pedía para él una pena de 16 años y medio, mientras que Manos Limpias solicitaba 22 años.
Jaume Matas: casi 4 años
El expresidente de Baleares y del Partido Popular en el archipiélago y exministro de Medio Ambiente estaba acusado por delitos de malversación y fraude. Los cometió presuntamente al contratar con Nóos de manera ilícita. Las penas que pedía la Fiscalía y la Abogacía balear eran de 5 años, mientras que Manos Limpias exigía 11 años de prisión.
Ana María Tejeiro: Absuelta
Ella era la responsable de personal de las empresas del conglomerado de Nóos. Para la esposa de Torres, Manos Limpias solicitaba 19 años y medio por los mismos delitos que su marido, aunque la Fiscalía sólo pedía 2 años de internamiento por blanqueo de capitales. Deberá pagar una multa conjunta con su marido de 344,934 euros.
Marco Antonio Tejeiro:
El cuñado de Torres y contable del Instituto Nóos se enfrentaba a los cargos de malversación y estafa. Las acusaciones solicitaban dos años de cárcel que podía conmutar por multas ya que colaboró con la Justicia al confesar su implicación.
Salvador Trinxet:
Al Asesor fiscal que colaboró en la creación del entramado empresarial solo le acusaba Manos Limpias, que pedía 3 años para él por blanqueo.
"Pepote":
El ex director general de Deportes del Gobierno balear, José Luis Ballester, conocido como Pepote, fue campeón olímpico de vela y amigo de los duques de Palma. Colaboró en la investigación y reparó el daño causado, por lo que la acusación pedía para él una pena de 2 años conmutable por una multa. Se le imputaba presunta malversación y fraude.
Gonzalo Bernal:
El que fue director de la Fundación Illesport de Baleares contrató de manera presuntamente irregular con el Instituto Nóos. Se le acusaba de malversación y fraude. Como atenuantes se le aplicaban la confesión y la reparación del daño para pedir 2 años de prisión a sustituir por multas.
Juan Carlos Alía:
El exdirector del Instituto Balear de Turismo (Ibatur) estaba acusado por participar en los contratos con Nóos. Se le imputaba falsedad (en concurso con prevaricación) y fraude a la administración. Como atenuantes se le aplicaban reparación del daño y confesión. La Fiscalía pedían una condena de 1 año a sustituir por multa. Manos Limpias solicita 11 años de prisión.
Miguel Ángel Bonet:
El exsecretario del Ibatur estaba acusado por los mismos delitos y razones que Juan Carlos Alía. Las acusaciones pedían un año de cárcel intercambiable por multas. Se le aplicaban los atenuantes de colaboración con la Justicia y reparación del daño.
Alfonso Grau: Inocente
El exvicealcalde de Valencia estaba estaba acusado de los presuntos delitos de prevaricación administrativa, malversación, fraude a la administración y tráfico de influencias. Contrató con el instituto Nóos a través de la Fundación que él presidía. Se enfrentaba a una petición de 11 años de cárcel.
Luis Lobón:
Al exsecretario de Turismo de la Comunidad Valenciana se le atribuían delitos de prevaricación, falsedad, malversación y tráfico de influencias al contratar al instituto de Urdangarin para organizar los foros Valencia Summit y promover la candidatura de la capital levantina para organizar unos Juegos Europeos. La acusación pedía para él de 8 a 11 años de prisión.
José Manuel Aguilar:
El exdirector de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia (CACSA) se enfrentaba a las mismas acusaciones que Lobón por haber participado, presuntamente, en los mismos delitos. El pseudosindicato Manos Limpias pedía para él 11 años de cárcel y la Fiscalía solicitaba 6 años.
Jorge Vela:
Al también exdirector de CACSA se le imputaban los mismos cargos que a los dos anteriores. Se enfrentaba a las mismas peticiones de cárcel que José Manuel Aguilar, 11 y 8 años de prisión.
Elisa Maldonado:
La que fue responsable jurídica de la CACSA estaba acusada de los mismos delitos que los tres acusados anteriores y se enfrentaba a posibles penas de cárcel de 8 y 11 años.
Mercedes Coghen: Absuelta
La ex consejera delegada de la candidatura olímpica Madrid 2016 estaba acusada de malversación, falsedad, prevaricación, fraude y tráfico de influencias por donar 140.000 euros a la Fundación Deporte, Cultura e Integración Social (Fdcis); una firma heredera del Instituto Nóos. La Fiscalía Anticorrupción solicitaba para ella una condenada de 5 años y 3 meses y Manos Limpias exigía 2 años y 6 meses de prisión.