El dirigente de Nuevas Generaciones del PP Ángel Carromero ha abandonado este viernes la cárcel de Segovia a las 18.10 horas, en un automóvil con destino a su domicilio en Madrid. Con un "gracias por la atención" dirigido a los numerosos medios de comunicación que desde por la mañana esperaban su salida, Carromero ha montado en el turismo en el que han ido a recogerle dos de sus amigos para viajar hacia Madrid. Carromero disfrutará del fin de semana después de que Instituciones Penitenciarias haya aprobado definitivamente la propuesta de tercer grado elevada por la Junta de Tratamiento del centro penitenciario.
El permiso de fin de semana para los presos que disfrutan el tercer grado no les obliga a volver a un centro penitenciario para dormir hasta el lunes por la noche. Además, Carromero ya no volverá a pisar la cárcel de Segovia ya que a partir de ahora dependerá de un Centro de Inserción Social (CIS) de la Comunidad de Madrid donde continuará con su empleo, ya que el Ayuntamiento de Madrid le mantendrá en la Junta de Distrito de Moratalaz como asesor técnico. Según las fuentes consultadas, todos los presos sujetos al régimen de semilibertad se encuentra en estos centros que tienen por objeto ir preparando a los internos para su reinserción en la sociedad.
La Junta de Tratamiento de la cárcel de Segovia además de elevar su propuesta de tercer grado este jueves también estableció el modo en el que Carromero tendría que cumplir en ese régimen su condena de cuatro años por homicidio imprudente impuesta por las autoridades cubanas. Entre las posibilidades que establece el reglamento penitenciario se encuentra la de someterse a un control telemático por el que no sería necesario acudir todas las noches a CIS a dormir.
Según la liquidación de la condena que dictó la Audiencia Nacional, de los cuatro años que se le impusieron a Carromero por homicidio imprudente en la isla caribeña ya había cumplido en la isla 159 días. Por tanto, de los 1.460 días de pena le quedaban por cumplir en España 1.301, aunque en la cárcel de Segovia ha dormido ya trece días. La condena, según esos cálculos, se cumpliría el 21 de julio de 2016.
Carromero fue condenado en Cuba a cuatro años de prisión por homicidio imprudente tras sufrir un accidente de tráfico el pasado 21 de julio en el que murieron los disidentes cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepera. Llegó a Madrid el pasado 29 de diciembre, procedente de La Habana, en aplicación del convenio bilateral de ejecución de sentencias penales que España y Cuba mantienen desde 1998 y que establece que las penas impuestas en el país caribeño a españoles podrán ser cumplidas en centros penitenciarios de nuestro país.