La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, acumula un total de 28 peticiones de comparecencia en el Congreso de los Diputados de los principales partidos de la oposición -Partido Popular, Ciudadanos y Vox- desde que asumió su cargo hace casi un año.
Este hecho provocó que los portavoces de estas formaciones en la Comisión de Exteriores del Congreso de los Diputados -Valentina Martínez (PP), Marta Martín (Cs) e Iván Espinosa de los Monteros (Vox), así como los representantes de UPN y Foro de Asturias- firmasen el 18 de noviembre un documento conjunto dirigido a la Mesa del Congreso, presidida por Meritxell Batet, para quejarse por esta situación.
González Laya tomó posesión el 13 de enero y desde entonces ha comparecido en dos ocasiones a petición propia. Primero fue el 20 de febrero para exponer las líneas generales de su departamento como hicieron el resto de ministros del Ejecutivo. La segunda vez data del 23 de abril y fue con motivo de la acción de Exteriores para informar de la gestión en la crisis de la covid-19.
Desde entonces, la ministra no ha vuelto a la Comisión de Asuntos Exteriores, "en lo que supone un claro freno a la obligación de responder al control parlamentario ejercido por parte de los grupos de la Cámara", censuran los firmantes de la carta.
Comparecencias "paralizadas"
La lista de las 28 peticiones de comparecencia, que se encuentran "paralizadas" a ojos de la oposición, comienza por la que presentó Ciudadanos el 13 de febrero para que González Laya explicase las gestiones para asegurar que las leyes de aguas territoriales aprobadas por Marruecos no afecten a las aguas de Canarias. Las últimas son de Vox –sobre la inestabilidad en el Egeo entre Turquía y Grecia- y los naranjas, en torno a la persecución a activistas, periodistas y artistas en Cuba.
Los grupos firmantes de este escrito consideraron "sumamente grave" la "parálisis" causada por la ministra a la función de control de la Comisión de Asuntos Exteriores. "Someterse al control parlamentario del Congreso no es un ejercicio voluntario u optativo para cualquier alto cargo del Gobierno. Someterse al control del Parlamento es una obligación inherente al desempeño de sus funciones", insistieron.
La iniciativa de la queja la tomó el PP, que fue el que redactó el escrito dirigido a Batet. El escrito acusa a González Laya de "eludir su obligación", de ahí que se subraye "el correlativo perjuicio del derecho constitucional de los diputados a obtener información precisa sobre su gestión en una situación tan grave como una pandemia".
La respuesta de Exteriores
Por todo ello, los grupos firmantes reclamaron a Batet que obligue a comparecer "sin excusa válida alguna" a la ministra "que ha desatendido sus obligaciones, con carácter inmediato, en la fecha que desde la presidencia de la comisión se comunique".
Desde el equipo de la ministra se alega que ha comparecido en otras comisiones en la Cámara baja, como la de Cooperación Internacional, la Mixta para la Unión Europea o en la Comisión de Reconstrucción. En el Senado ha comparecido en la Comisión de Exteriores y en la de Cooperación al Desarrollo.