La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a 9 años de cárcel a Nene, líder de los Dominican Don't Play (DDP) de Alcobendas, y a 7 años y medio a otros cinco integrantes de la banda por la muerte de un joven de 18 años en las fiestas de San Agustín de Guadalix en 2017.
En la sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, el tribunal impone las penas acordadas por la fiscal y las defensas tras la confesión de los condenados en la última sesión del juicio así como una indemnización conjunta de 100.000 euros a los padres de la víctima y el pago individual de 3.000 euros en concepto de reparación de daños.
La representante del Ministerio Público había rebajado previamente su petición de 22 a 9 años para Nene y de 20 a 7 años y medio para el resto, a quienes un jurado popular declaró culpables por unanimidad de sendos delitos de homicidio y pertenencia a organización criminal.
"Revancha"
Por el contrario, consideraron inocente a un séptimo acusado por no haberse probado su implicación en el crimen y al que la fiscal y la acusación no atribuían la pertenencia a los DDP.
La sentencia señala, como reconocieron los seis condenados, que acudieron armados al recinto ferial de San Agustín del Guadalix "a efectos de revancha" contra un grupo de jóvenes tras un enfrentamiento previo con un amigo de la víctima y "asumiendo la posibilidad de poder acabar con la vida de alguno de ellos".
Una vez allí se produjo una trifulca entre los dos grupos durante la que golpearon en la cabeza al joven y, acto seguido, Panda, el autor confeso del crimen, le asestó una puñalada en el corazón tras recibir la orden a través de una señal con la mirada de Nene.
El tribunal también considera probado que, en base a la confesión, integraban el "coro" o grupo de Alcobendas de los DDP. Según detalla la sentencia, Nene era el "soberano" o líder del grupo, Dom Blacki ocupaba un cargo de directivo y el resto eran "soldados" en la escala básica dentro de la banda.