Ni mañana viernes, como querían los que piden su dimisión, ni el jueves de la semana que viene, como pretendía él. Un Carlos Dívar cada vez más acorralado por sus propios compañeros por el escándalo de sus viajes de fin de semana a cargo del dinero público ha anunciado hoy que el pleno extraordinario del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) en el que se decidirá su futuro tendrá lugar el próximo sábado a partir de las 11 de la mañana. Sólo tendrá dos puntos en el orden del día. La propuesta de cuatro vocales para que presente su dimisión de modo voluntaria, y la petición de un quinto miembro, José Manuel Gómez Benítez, que ha planteado su remoción del cargo.
Tras la petición de ayer de cinco vocales, Dívar sólo podía retrasar el pleno un máximo de 72 horas. Ha apurado ese plazo
La decisión de Dívar de adelantar el pleno no es, sin embargo, voluntaria. La ley no de le dejaba margen para posponerlo como pretendía. Al ser cinco los vocales que solicitaban la convocatoria, el único margen que le quedaba al presidente del CGPJ era agotar el plazo máximo para celebrarlo: 72 horas. Lo ha apurado. De este modo, el cuestionado máximo representante de la justicia española apura al máximo los tiempos en un desesperado intento por mantenerse en el cargo hasta el próximo lunes, cuando se inician en el Tribunal Supremo los actos de celebración del Bicentenario de esta institución. Su intención es presidirlos, ya que está prevista, aunque aún no confirmada, la presencia del rey don Juan Carlos y de los máximos representantes de las Cortes Supremas iberoamericanas en el evento principal, que se celebra el próximo lunes.
Si hubiera conseguido retrasar el pleno hasta el jueves, como quería cuando ayer presentó por sorpresa él una convocatoria para ese día, hubiera conseguido su objetivo. Ahora, sin embargo, su cargo y, por tanto, su presencia en el mismo pende de un hilo. O mejor dicho, de doce. Son el número de votos que se necesitan en el seno del CGPJ para forzar su cese, como exige el vocal Gómez Benítez. Hace unas semanas, alcanzar ese número de miembros del Consejo partidarios de su salida fue imposible. A día de hoy, sin embargo, está mucho más cerca. Como adelanta hoy Vozpópuli, en los últimos días son cada vez más los vocales hasta ahora afines a él que han cambiado su postura en los últimos días tras surgir nuevos datos sobre sus polémicos gastos en 32 viajes de fin de semana a Marbella y otros puntos de España.
Cambio de mayoría en el CGPJ
Algunos de los que hasta ahora se le consideraban cercanos a él han cambiado su postura y desean que presente su dimisión, según pudo constatar este diario en las últimas horas. Éstos prefieren que sea el propio Dívar el que fuerce su salida, como piden cuatro vocales por escrito, pero si el presidente del CGPJ sigue aferrado a su sillón, algunos no descartan votar a favor de su remoción del cargo "por incumplimiento grave de sus deberes".
Ayer, el Tribunal Supremo descartó por 11 votos contra cuatro tramitar la querella que contra él había presentado un despacho de abogados de Murcia por malversación de caudales públicos en sus viajes. Se espera que en las próximas horas se hagan públicos los votos particulares de los cuatro magistrados discrepantes, los cuales se convertirán de nuevo en una carga de profundidad contra la permanencia en el cargo y el nueva munición para los miembros del Consejo que exigen su salida ya.
Mientras la Casa Real aún no ha confirmado si el Rey acudirá a los actos del Bicentenario del Supremo que tanto desea presidir Dívar. Hasta las 14.00 horas de hoy, en su agenda no aparecía reflejado ningún acto para la semana que viene. Tampoco el del TS, a pesar de que éste ya ha anunciado la presencia del Jefe del Estado en el mismo en una nota de prensa.