El cierre perimetral entre comunidades autónomas se impuso en Semana Santa para evitar un efecto contagio similar al de Navidad. Si bien es cierto que la cifra de contagios de esta cuarta ola del coronavirus está siendo muy inferior (salvo en el caso de Navarra), los nuevos casos de coronavirus han seguido creciendo progresivamente esta última semana en todas las comunidades autónomas, menos en Extremadura.
¿Sirve para algo el cierre perimetral? Los especialistas se inclinan por su defensa. Alejandro Conde, médico de Salud Pública y miembro de la Sociedad Española de Medicina Preventiva (Sempsph), explica a Vozpópuli que el cierre perimetral tiene como fin evitar que zonas más contagiadas propaguen el virus a lugares más protegidos.
"Cumplen la misma función que una cuarentena, pero a mayor escala. Si una comunidad autónoma tiene una incidencia de casos alta y se permite la movilidad a zonas con incidencia baja, se estaría propagando el virus", señala.
Eso sí, Conde matiza que no habría problema en viajar entre comunidades autónomas de incidencia similar. En esta misma línea se muestran los profesionales de sanidad exterior respecto a la apertura de fronteras: "Cuando la incidencia española sea muy buena es el momento de cerrar fronteras, salvo con países de poca incidencia".
Sin embargo, desde la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid se muestran contrarios al cierre perimetral. "Siempre que implantamos un cierre perimetral suben los contagios", aseveran fuentes de la Consejería de Sanidad, que apuntan a que la densidad poblacional de Madrid es tan alta que un cierre favorece la concentración y propagación de casos.
El misterio de los contagios en Navarra
También generan dudas casos como el de Navarra, que con cierre perimetral y cierre del interior de los bares en Semana Santa muestra una incidencia de casos superior (443) a la de Madrid (372). Al igual podría decirse de Castilla y León, que presenta la mayor cantidad de muertes por coronavirus cada 100.000 habitantes a pesar de las duras medidas aplicadas.
El presidente de la Sempsph, Rafael Ortí, manifiesta sobre los cierres perimetrales que su objetivo es "reducir la movilidad en general. Quien se va de una comunidad a otra, o de un pueblo a otro, lo hace para ver a un familiar, hacer turismo, tomar copas, etc. Cuando sales por estos motivos te vas a reunir con gente y eso es lo que hay que evitar para mantener a raya los contagios".
Concuerda con Conde en que entre una comunidad con poca incidencia y una con mucha no debe haber puertas abiertas, salvo si el que viaja lo hace desde una región con buena incidencia y se hace una PCR antes de volver: "Si tenemos Madrid muy mal y Valencia muy bien, bienvenido sea el que no venga gente. Ahora, bien, al revés podrían permitirse los viajes siempre y cuando volvieran con una PCR negativa".
Es mejor un confinamiento domiciliario de 15 días que uno descafeinado"Rafael Ortí, presidente de la Sociedad Española de Medicina Preventiva.
No obstante, este especialista sigue defendiendo que "es mejor un confinamiento domiciliario de 15 días que uno descafeinado como los que tenemos ahora, que se extienden más en el tiempo". Al contrario que lo que señala la Comunidad de Madrid, apunta que "hay publicación de sobra sobre los contagios covid en bares y restaurantes".
Sobre el misterio del incremento de casos en País Vasco y Navarra, manifiesta que la clave puede estar en el turismo francés. "Estas comunidades están muy influenciadas por el turismo de copas francés. Además, sus restricciones hosteleras no han sido tan duras como, por ejemplo, las de Comunidad Valenciana, con cierre a las 6 de la tarde. Esto nos ha permitido tener una incidencia de menos de 40 en estos momentos".
Ortí aboga por mantener estas medidas en la Comunidad Valenciana hasta el 9 de mayo, para que dé tiempo a tener a más personas mayores de 60 vacunadas.