En estos momentos, uno de cada cinco españoles tiene 65 o más años. Según las previsiones del Plan España 2050, en tres décadas serán uno de cada de tres los españoles de más de 65 años. Este aumento supone que, para 2050, el 33% de los españoles tendrá más de 65 años. Sin embargo, el mismo plan que augura que las personas mayores pasarán de formar el 20% de la ciudadanía al 33%, solo prevé un incremento del gasto sanitario respecto al Producto Interior Bruto (PIB) del 1%.
El documento de Sánchez se empeña en justificar que el envejecimiento de la población no va a suponer un mayor gasto sanitario: "No es de esperar que el cambio demográfico por sí solo dispare el gasto del sistema sanitario, aunque esto dependerá, en gran medida, de cuál sea el estado de salud de las cohortes de personas en edades avanzadas y de cómo evolucione la estructura y la cobertura de las prestaciones sanitarias".
Lo que viene a decir el documento es que "en un escenario en el que las ganancias en esperanza de vida no van acompañadas de un mejor estado de salud, el efecto del envejecimiento impulsaría el gasto sanitario público en 0,9 puntos del PIB para 2050".
Es decir, que como máximo, el plan de Sánchez prevé un incremento del gasto sanitario del 0,9% del PIB. Para ello, pone su confianza en "la generalización de innovaciones farmacéuticas y biotecnológicas revolucionarias, como la terapia génica, las células madre, el uso masivo de datos y sistemas de Inteligencia Artificial, la robótica o los wearables, que permitirán el desarrollo de una medicina mucho más personalizada, predictiva y efectiva, especialmente en áreas terapéuticas como la oncológica".
Sin embargo, todas estas innovaciones requieren de mayor inversión. Por ejemplo, tratar solo a una persona con terapia CART (inmunoterapia) supone un coste de alrededor de 300.000 euros por persona.
"Otro plan poco realista"
La previsión del gasto sanitario del Plan España 2050 no ha dejado indiferente a médicos, enfermeros y sanidad privada, que lo califican de "otro plan poco realista". El presidente del Consejo General de Colegios de Médicos (Cgcom), Tomás Cobo, declara a Vozpópuli que "si el sistema no pone dinero para mantener el modelo sanitario que nos permite dar una atención universal y de calidad, irá derivando a otros entornos".
Para Cobo, "si comparamos el gasto sanitario por PIB de España con países como Suecia, Reino Unido, Alemania… Salimos mal parados. Todos superan un 9%. Nosotros tenemos un gasto del 6%. Pensar que en el 2050 vamos a tener un 7% de gasto, en un contexto en el que hay tantas personas mayores de 65 no se ajusta a la realidad".
Es más, para el presidente de la profesión médica, un 7% de gasto sanitario no es suficiente ni siquiera en los términos demográficos actuales, "habría que subirlo dos puntos". "Hay que invertir en la atención sanitaria, pero también en formación de profesionales y en investigación. Hay un amplio margen de mejora", añade.
España, lejos de la media de la UE
Si se mantiene la previsión de este plan, España no alcanzará a la media actual de gasto sanitario de la Unión Europea ni en 30 años. Así lo denuncia Diego Ayuso, secretario general del Consejo General de Enfermería, "un plan para 2050 que destine solo el 7% del PIB al gasto sanitario no es realista, ya que invertir en sanidad es invertir en salud y en la economía de un país, y se ha puesto de manifiesto de forma clara ahora en pandemia, los países que ya están saliendo de la crisis sanitaria son los que más invierten en sanidad".
La media del gasto sanitario frente a PIB en la Unión Europea supera el 9%, "por tanto lo sensato es aproximarse al 9% en 2050 en España para ser competitivos, más teniendo en cuenta el envejecimiento de la población y el incremento de la cronicidad que lleva asociada en España. Las previsiones demográficas indican que, en tres décadas, el 30% de la población española será mayor de 65 años, lo que implicará un importante aumento del número de enfermos crónicos en el Sistema Nacional de Salud, y hay que tener muy presentes que los pacientes crónicos desencadenan el 75% del gasto público sanitario", sentencia.
Se une a las críticas el presidente del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS), Juan Abarca Cidón, quien señala que no sabe lo que va a pasar en 2050, pero que "el actual gasto sanitario es insuficiente. Se deberían subir dos puntos el gasto sanitario actual para poder cubrir la demanda sanitaria y la sociosanitaria".
Con semejante inversión, "es difícil atender las necesidades de la sanidad y las posibilidades de las nuevas tecnologías, terapias avanzadas y medicina personalizada. El panorama, a priori, es bastante desalentador".