Mohamed Houli Chemlal, el joven de 21 años que resultó herido en la deflagración en el chalet de Alcanar (Tarragona) en la que los autores de los atentados de Cataluña almacenaban y preparan explosivos, ha sido el primero de los cuatro detenidos por los ataques del pasado jueves en sentarse frente al juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu y la fiscal encargada del caso, Ana Noé.
Houli es uno de los cuatro arrestados en relación con los atentados de Barcelona y Cambrils (Tarragona) que han llegado este martes a la Audiencia Nacional, tras pasar la noche en la Comandancia de la Guardia Civil en Tres Cantos. Fue detenido en el hospital donde se encontraba ingresado tras resultar herido en la explosión de Alcanar, en la que presuntamente murieron otros dos miembros de la célula.
Ahora, será el primero en comparecer ante Andreu, minutos antes de las 13.00 horas. Como los otros tres, estará asistido por un abogado de oficio en su declaración, en la que no se prevé necesaria la intervención de intérpretes, aunque estarán presentes, dado que todos hablan castellano.
Una vez finalicen, el juez Andreu decidirá si decreta prisión provisional. En ese caso, fuentes policiales han apuntado que Houli será llevado a la prisión de Alcalá Meco, mientras que los otros tres serán trasladados a Soto del Real.
Houli fue el segundo detenido en estos atentados. Pocas horas antes se había procedido a detener Driss Oukabir, a cuyo nombre se alquiló una furgoneta usada por los terroristas. Por eso, su imagen fue la primera que se conoció en relación con estos atentados, poco después de que la furgoneta conducida por Younes Abouyaaqoub -abatido ayer por los mossos- sembrara de muerte las Ramblas.
Oukabir aseguró ante la Policía que su hermano Moussa, de 17 años, le había robado la documentación. Horas después, pasada la una de la mañana del viernes, Moussa falleció junto con otros cuatro terroristas en el atentado de Cambrils, que acabó con la vida de una mujer.
Los otros dos detenidos son Mohamed Aallaa, de 27 años, en Ripoll, y hermano de Sadi Aallaa, abatido en Cambrils, y Salah El Karib, de 34 años, que regenta un locutorio y a quien la Policía relaciona con Driss Oukabir.
A los cuatro se les considera presuntos miembros de la célula que perpetró los atentados y a la que se da por neutralizada. Cinco de sus integrantes fueron abatidos en Cambrils, otros dos habrían muerto en la explosión de Alcanar (entre ellos el supuesto líder espiritual, el imán Abdelbaki Es Satty) y los mossos ayer al último, supuesto autor material de 15 muertes, Younes Abouyaaqoub, que llevaba huido desde el jueves, cuando se dio a la fuga una vez se bajó de la furgoneta que protagonizó el atropello masivo en Barcelona.
