Y, por fin, se desveló el secreto. La Consejería de Gobernación ha hecho pública este miércoles la deuda que mantiene el Ejecutivo liderado por Carles Puigdemont con los municipios: 633 millones de euros. Una cantidad que ha ido in crecendo desde 2014 hasta el punto de haberse multiplicado por 100 en dos años.
Así, y según el desglose efectuado por la propia consejería, la deuda antes de 2014 era de cuatro millones de euros mientras que en 2014 se disparó hasta los 109 millones. El año pasado, la cifra subió hasta los 520 millones, hasta lograr los 633 millones actuales, según informa el periódico Crónica Global. En el caso del consistorio de Barcelona, la Generalitat reconoció tras un encuentro con su alcaldesa, Ada Colau, que le debe cerca de 100 millones de euros
Por su parte, la consejera de Gobernación, Meritxell Borràs, ha culpado al Gobierno central de esta situación en respuesta a una pregunta parlamentaria formulada por el diputado de Ciudadanos Sergio Sanz. En su línea habitual, la Generalitat explica que esto se produce porque desde 2012 tienen la obligación de dar "prioridad absoluta" al pago de intereses de la deuda pública y al cumplimiento de los periodos medios de pago a los proveedores. E incluso apuntan que desde el 20 de noviembre de 2015, el Ejecutivo de Mariano Rajoy asumió el control de pagos en Cataluña con fondos del FLA, teniendo que priorizar servicios públicos.
Para el Gobierno catalán, el presupuesto total de los ingresos con los ayuntamientos alcanzó en 2015 los 8.971,3 millones, un 7,06% de la deuda contraída con los municipios. La Generalitat confirma que durante este año se saldará la deuda con los consistorios.
Por último, el diputado de C's ve "vergonzoso" la gestión del Gobierno catalán, al que acusa de usar sus sueños secesionistas para no asumir sus responsabilidades presupuestarias.