La música les gusta, pero la letra no tanto. Así se puede resumir la posición de Podemos ante la reforma express de la Constitución que Albert Rivera, líder de Ciudadanos, ha planteado al PSOE para dar su apoyo a la investidura de Pedro Sánchez. “Son medidas saludables –dijo Íñigo Errejón-, pero son más un parche que una reforma en profundidad”.
Todas las iniciativas de Ciudadanos aparecen contempladas en el programa electoral de Podemos, que echa en falta mayor concreción y, sobre todo, otras medidas de calado a las que el partido naranja no alude. Así, por ejemplo, frente a la rebaja de 500.000 a 250.000 el número de firmas necesarias para presentar una Iniciativa Legislativa Popular (ILP), Errejón ha rebatido que en Europa el límite ronda las cien mil firmas pero, en cualquier caso, ha dicho “lo importante no es el número, sino que las ILP no tengan que pasar por la Mesa del Congreso para ser aceptadas, sino que se debatan directamente y sean vinculantes”. Sobre la desaparición de las diputaciones provinciales, Podemos se muestra también de acuerdo y de su sustitución por mancomunidades de municipios, siempre que a éstas se las dotede recursos económicos.
“La propuesta es escasa, poco atrevida”, insistió Errejón, que echa en falta en la propuesta de Rivera una reforma de la Constitución que blinde los derechos sociales, una condición sine qua non de Podemos para apoyar cualquier iniciativa de este tipo. El portavoz parlamentario del partido morado señaló que hay que modificar la Ley de Contratos del Estado, prohibir las puertas giratorias y endurecer la ley de financiación de los partidos políticos, cuestiones en la que no entra la propuesta lanzada por Rivera.
“Para ser un acuerdo de regeneración democrática la propuesta se queda muy corta –señaló Errejón-. No sé dónde en qué barrios viven los señores de Ciudadanos, porque los problemas de los españoles siguen siendo la falta de empleo, la sanidad, la educación, cuestiones todas que tienen que estar presenten en cualquier propuesta de regeneración”.
