El pasado lunes 2 de octubre, un día después de la celebración del referéndum ilegal en el que fue duramente criticada la actuación policial, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, declaró a la radio catalana RAC1 que denunciaría las cargas policiales llevadas a cabo por la Policía y por la Guardia Civil para impedir la votación del 1 de octubre. Asimismo, Colau afirmó que denunciaría, además de las cargas, que se habrían cometido agresiones sexuales por parte de estos Cuerpos de Seguridad. Ahora, esa denuncia se ha puesto en su contra y ha sido el Ministerio del Interior el que va a tomar medidas contra la alcaldesa de la ciudad condal por si pudieran ser constitutivas de delito.
Interior ha comunicado que trasladarán a la Fiscalía las declaraciones de la alcaldesa. En una entrevista en RAC1, Colau aseguró que le llegaron varios testimonios de mujeres que “no solo habían sufrido cargas policiales”, sino que también habían denunciado agresiones sexuales por parte de los guardias. “Hay más de un caso”, añadió Colau, que contó que conocía la historia de una testigo “directa” de la Barceloneta.
No obstante, fuentes de Interior han aclarado que las declaraciones de la alcaldesa de Barcelona se trasladarán a la Fiscalía por si pudieran ser constitutivas de delito, en relación al artículo 504 sobre injurias y calumnias contra la Policía, u otros.
En el artículo mencionado se lee:
“Incurrirán en la pena de multa de doce a dieciocho meses los que calumnien, injurien o amenacen gravemente al Gobierno de la Nación, al Consejo General del Poder Judicial, al Tribunal Constitucional, al Tribunal Supremo, o al Consejo de Gobierno o al Tribunal Superior de Justicia de una Comunidad Autónoma”.
El caso de Marta Torrecillas
Colau no dudó en recordar el caso de una mujer que denunció que habría sufrido abusos a través de un vídeo que se pudo ver en todos los medios y que ardió como la pólvora en las redes sociales. En dichas declaraciones, la protagonista, Marta Torrecillas, mostraba un brazo escayolado y afirmaba que un policía se había dedicado a romperle los dedos de la mano uno a uno. Asimismo, aseveró que uno de los agentes que la reprimió también le tocó los pechos mientras se mofaba de la misma. Esta persona, que ofreció su testimonio desde el Instituto Pau Claris, se retractó de sus palabras tan solo un día después, en TV3, donde decía que había exagerado por la situación y, por lo tanto, ni la rompieron las falanges de la mano una por una ni abusaron de ella.
https://twitter.com/danielsirera/status/914971098869100544?ref_src=twsrc%5Etfw
Las duras palabras de la militante de ERC se hicieron en un programa de la televisión catalana al que invitaron a tres víctimas de la intervención de la Policía y la Guardia Civil. Señaló que su dura declaración se debió a que en aquel momento le dolía mucho y por el nerviosismo dijo lo que dijo. Torrecillas aseveró que decir que le habían roto los dedos uno a uno “es lo primero que te viene cuanto estás en esa situación”. No obstante, aclaró: “Me partieron como una cápsula que hay entre los dedos en la que hay como unos ligamentos, no es capsulitis. Eso hizo que no pudiera mover los dedos”.
https://twitter.com/DavidVallsTeix/status/914547079216844801?ref_src=twsrc%5Etfw
Por consiguiente, en el vídeo en el que denunciaba la actuación de la Policía aparecía con un gran vendaje en la mano derecha, hecho que cambió. En TV3 apareció con la mano izquierda y un vendaje en el dedo afectado.