Aseguran en el entorno del todavía presidente del PP andaluz, Javier Arenas, que no hubo ningún detonante, pero desde hace un mes comenzó a acariciar la idea de, "por coherencia", no presentarse a la reelección como líder del partido. Hasta ese momento, había acordado con Mariano Rajoy continuar para posibilitar una sucesión ordenada dentro de una de las organizaciones más numerosas y con más peso del PP, pero acabó convencido de que, seguir al frente de los populares, supondría "un tapón de futuro" poco consecuente con su decisión de no volver a aspirar a la presidencia de la Junta de Andalucía.
Rajoy y Arenas "compartieron hasta el final" esta decisión. "La gente ve a quien lleva un montón de años", aducen fuentes andaluzas en relación al también vicesecretario de política autonómica y local del PP, además de senador y diputado regional. Arenas no tenía ya "horizonte de futuro" dentro del PP andaluz, aunque sí mantendrá, "en principio" su escaño en el Parlamento de Andalucía. Sin embargo, es inevitable ver esta renuncia en clave de política nacional a pesar de que las fuentes consultadas por Vozpópuli respondan tajantes "nuevas responsabilidades, no", al ser interrogadas sobre si está llamado a tener mayor protagonismo en la política nacional.
Es más, en este punto recuerdan que ya venía manteniendo un gran nivel de actividad en la organización de encuentros en Génova con consejeros autonómicos de sanidad, educación o Hacienda, pero hasta la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, admitió ayer que una vez que Arenas tenga más tiempo para dedicar a la visecretaría, --"como ya tenía intención de hacerlo", subrayó-- habrá más comparecencias ante la opinión pública, algo que contemplaban con no poca simpatía sectores del partido y del Gobierno que veían falta de gancho de la nueva dirección del partido.
El status de Arenas dentro del partido no cambiará y, en principio mantendrá el escaño del parlamento andaluz
Eso sí, para ello, es cierto que Arenas no asumirá, al menos nominalmente, otra responsabilidad que no sea la de vicesecretario de política autonómica y local. Y así lo dejó muy claro Cospedal al afirmar que Arenas "tiene una gran tarea por delante" a la hora de coordinar a las Comunidades y buscar salidas a los grandes problemas que tiene hoy la administración española" capítulos en los que el papel y el trabajo de Arenas "va a ser muy importante". Pero el escalafón no cambia, y Cospedal se felicitó de su suerte de tener "tres magníficos vicesecretarios" en alusión también a a Carlos Floriano y a Esteban González Pons, presentes ambos en la rueda de prensa posterior a la reunión del comité de dirección, cita a la que no acudió Javier Arenas.
Por lo pronto, el vicesecretario de política municipal y autonómica, tiene en agenda dos grandes cumbres del partido con las que lucirse en las próximas semanas, amén del congreso del PP andaluz que se celebrará los días 13, 14 y 15 de julio. El próximo viernes y sábado se celebra en San Sebastián reunión de la interparlamentaria popular, que reunirá en San Sebastián a los parlamentarios nacionales y autonómicos del partido, organización que depende del departamento de Arenas. Poco más de un mes después, el 20 y 21 de julio, Santiago de Compostela acogerá la intermunicipal, en su caso, cumbre de alcaldes y presidentes de Diputación. El PP ya ha puesto proa a las elecciones vascas y gallegas y de ahí que haya elegido San Sebastián y Santiago. Desde el entorno de Arenas afirman que no habrá ningún tipo de escenificación para el "regreso" de Arenas e insisten en que su pretensión es permanecer en un "segundo plano".
Respecto a su relevo en Andalucía, todo apunta a que será el alcalde de Sevilla, Juan Antonio Zoido, el que asuma las riendas del partido y, con ello, la candidatura a las próximas elecciones autonómicas, pero tampoco hay que perder de vista otros nombres como el de la ministra de Empleo, Fátima Báñez.
