Poco a poco se va conociendo más información del caso del profesor que presuntamente grababa a sus alumnas en el Colegio Virgen de Europa de Boadilla del Monte. Según han afirmado varios testigos a Vozpópuli, este docente tenía dos cámaras y una de ellas fue localizada de forma fortuita por una mujer, a 300 metros de su casa, que paseaba a su perro. Esa casualidad inició toda la investigación mientras el detenido entró en cólera por su pérdida.
Al día siguiente, este profesor, A.M., se dio cuenta de la desaparición de este material. Entró en cólera por lo que gritó y amenazó a un grupo de niños ya que se creía que le habían robado la cámara. Incluso, les llegó a dejar en el colegio, con la vigilancia de otra persona, y les cerró la puerta para que no pudieran salir hasta que volviera.
"El profesor está loco"
Se desplazó a su casa para buscarla desesperadamente. Al no encontrarla regresó al centro y siguió pidiendo a los niños que se la devolvieran. "Acusó a un niño y sus padres fueron a protestar. Varias niñas se asustaron y llamaron a sus madres diciendo que el profesor estaba loco", confiesan desde el entorno del centro de Boadilla.
El colegio en conjunto volvió en varias ocasiones a pedir que se devolviera esta cámara. Algo que incluso sorprendió a otros docentes ya que no entendía la extrema movilización para recuperar este material. Además de las grabaciones en las investigaciones de la Guardia Civil también hay declaraciones de varias alumnas del colegio.
Discos duros escondidos
La mujer que encontró la mochila con la cámara y la tarjeta de memoria la entregó el 19 de julio en la Guardia Civil de San Lorenzo de El Escorial. Este material fue encontrado a solo 300 metros de donde vive el profesor. Diez días después, los agentes hallaron en su domicilio un total de 27 discos duros y cintas. Doce de estos discos estaban taladrados. También había destrozado tres ordenadores. Mucho de este material estaba escondido entre las paredes del domicilio y en los conductos del aire acondicionado. Todo para que no fuera localizado por los investigadores.
Cinco de las ocho familias de las menores de Boadilla que aparecen en las grabaciones emitieron ayer un comunicado que de que el centro no apartó de sus funciones al profesor. En una nota, adelantada por la Agencia EFE, dicen que fue el Juzgado de Instrucción número 5 de Móstoles, que lleva la causa, el que tomó la medida de alejar al profesor investigado de las instalaciones escolares.
Solo hay una "violación de la intimidad"
Este miércoles, el colegio Virgen de Europa ha lanzado otro comunicado respondiendo a las familias. Defienden que este docente fue separado del claustro y de todas sus funciones nada más conocerse la investigación. Los padres afectados pidieron la dimisión del directo, hermano del detenido, pero ésta no fue aceptada por la Junta de la Sociedad, el equipo directivo y la Asociación de Padres del centro de Boadilla.
Además, el centro dice que la única acusación sobre este docente que conocen a día de hoy es la de "violación de la intimidad" y dicen que "no hay difusión de imágenes en las redes, no hay acusación de abusos a menores y no se han encontrado imágenes de contenido inapropiado de otros cursos" en el colegio de Boadilla.
Grababa en la sala de audiovisuales
El 'modus operandi' del profesor se prolongó durante años a tenor del material que se está revisando. El frío en el vestuario femenino era la excusa que utilizaba este docente para que sus alumnas, de unos 12 años, se cambiaran en su despacho, que era la sala de audiovisuales, para acudir a las clases de Educación Física.
Esta situación era de sobra conocida por las familias, según fuentes del entorno a Vozpópuli. Lo que desconocían es que en esta sala las cámaras grabaran a las menores cambiándose. El profesor fue detenido en junio por un delito de tenencia y producción de pornografía infantil, según informan fuentes del instituto armado.