Las derivas soberanistas en País Vasco y Cataluña siguen caminos paralelos. Si bien el Gobierno de Artur Mas financia la formación de diplomáticos amateurs (con un presupuesto de 2,6 millones de euros para 2014), el Ejecutivo de Iñigo Urkullu también hace lo propio con cargo al contribuyente. El lehendakari mantiene la puerta abierta a la celebración en 2015 de una consulta popular sobre un nuevo estatuto vasco que le permita alcanzar mayores cotas de autogobierno. Para esa fecha, los nacionalistas saben que deberán haber propagado lo suficiente su proyecto de "autodeterminación" y haber recabado el mayor número posible de apoyos en la comunidad internacional.
En este contexto, la Secretaría General de Acción Exterior del Gobierno vasco (que viene a ser el Consejo de Diplomacia Pública de Cataluña, conocido como Diplocat), órgano adscrito al departamento de Urkullu, acaba de designar a los ocho componentes que cursarán el programa de "especialización de profesionales en el área de Acción Exterior" durante 2014. La dotación prevista para cubrir los gastos ordinarios de viajes, manutención y alojamiento de estos diplomáticos amateurs asciende a 258.000 euros.
Los ocho elegidos, que completarán el curso durante 12 meses, se repartirán estos cuatro destinos con la siguiente distribución: cuatro en la Secretaría General de Acción Exterior, sede central en Vitoria; dos en la delegación del País Vasco para la Unión Europea, en Bruselas; una en la embajada de México, en México DF y una en la oficina para Chile, Perú y Colombia, en Santiago de Chile. La dotación económica para la primera de estas ubicaciones se eleva a 16.000 euros por persona, mientras que para el resto la suma es de 24.000 euros.
Las principales 'embajadas' vascas reciben más de 2,6 millones de euros para su funcionamiento en los Presupuestos autonómicos de 2014
A cada uno de estos diplomáticos aficionados se les exige elevados conocimientos sobre actualidad política y económica a nivel europeo e internacional, estudios universitarios de postgrado en la materia, habilidades sociales y capacidad de organización de una misión institucional. También es valorado que hayan opositado a algún puesto en la Unión Europea o en alguna otra legación y, por supuesto, se premia la destreza en el uso del euskera.
El Gobierno de Urkullu, a través de la Agencia Vasca de Desarrollo Empresarial (Spri), dependiente de la Consejería de Desarrollo Económico y Competitividad -en Andalucía es la Agencia de Promoción Exterior (Extenda)-, cuenta actualmente con oficinas comerciales o embajadas en un total de 15 países: Alemania, Argentina, Brasil, Estados Unidos, Chile, China, Colombia, India, México, Polonia, República Checa, Eslovaquia, República Checa, Singapur y Turquía.
Además de poseer esta red de oficinas permanentes, el Ejecutivo vasco trabaja con consultores locales especializados en cerca de 70 países. La última delegación abierta ha sido la de Alemania. Según el gabinete de Urkullu, el 14% de las exportaciones vascas van destinadas al mercado germano.
La internacionalización, "objetivo preferente"
País Vasco, la región con más embajadas, y Cataluña son las dos únicas comunidades autónomas que se han negado a firmar un compromiso con el Ejecutivo central para integrar alguna de sus sedes extranjeras o la totalidad de las mismas en las legaciones españolas y oficinas del Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX). Los nacionalistas vascos mantienen que "el futuro de cualquier sociedad se construye en un escenario global", por lo que "no se puede hacer dando la espalda al mundo". Además, a la hora de rechazar la oferta del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, insisten que la internacionalización del País Vasco es "objetivo preferente" del Ejecutivo autonómico.
Según recogen los Presupuestos vascos para 2014, las principales sedes reciben más de 2,6 millones de euros para su funcionamiento: la delegación para la Unión Europea tiene una asignación de 1.196.455 euros; la de Estados Unidos, 383.042; la de Argentina-Mercosur, 365.744; la de Chile, Perú, Colombia, 350.687; y la de México, 340.217.
El pasado octubre, Aitzol Azurtza, entonces presidente de la embajada vasca en EEUU, ubicada en Nueva York, dejó el cargo tras un encontronazo con Urkullu, de visita con motivo del centenario de esta sede. El choque se debió a la emisión de un vídeo protagonizado por el alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre, miembro de Bildu. Además, la prensa se hizo de la faceta de Azurtza como actor porno gay y de su participación en una docena de películas para adultos.