En política, las victorias son efímeras. Pedro Sánchez pensaba que no vería el balón de la amnistía moverse en el Congreso de los Diputados tras la patada que le dio este martes el diputado socialista Óscar Puente, cuya réplica chulesca al líder del PP durante su investidura sacó de la conversación pública la medida de gracia a los independentistas. Pero el presidente en funciones no podía estar más equivocado. Los secesionistas siempre llaman dos veces a la puerta. Y este viernes, el PSOE tendrá que defender en la Cámara Baja que no está dispuesto a negociar un referéndum de autodeterminación, como le exigieron este jueves Junts y ERC a cambio de investir a Sánchez presidente del Gobierno.
A Ferraz no le quedó más remedio que mover ficha tras el pacto que sellaron ambas fuerzas independentistas para no investir a ningún candidato a presidente que no se comprometa a trabajar para hacer efectiva una consulta de autodeterminación en Cataluña. Los socialistas se agarraron al marco constitucional, al diálogo, la convivencia y el entendimiento. Todo es un compendio de categorías en las que no entra un referéndum divisivo que ponga a los catalanes en la tesitura de decir 'no' al resto del país. Esa es la gran línea roja del PSOE. O, al menos, la que hace ver, porque en política lo que parece es. El presidente sabe que no puede atravesar una puerta que le llevaría directo a la inconstitucionalidad. Por eso publicó ese comunicado, para que el PP no use la exigencia secesionista este viernes en el Congreso y atice a Sánchez, quien podría verse interpelado a hablar en la Cámara. El plan del PSOE es que lo hiciera Puente. Aunque está por verse si hay cambio de guion.
El momento que eligieron los independentistas para hacer público ese acuerdo, que tendrá que votarse en el Parlamento catalán, no es casual. Buscan presionar a Sánchez y hacerle sudar tinta. Ambos partidos siguen envueltos en una brutal disputa por la hegemonía del espacio independentista. Ninguno de los dos, con el horizonte de elecciones catalanas, quiere aparecer ante los suyos como un traidor a la causa. Y ese es el motivo por el que firmaron conjuntamente esa resolución. El propio Oriol Junqueras, líder de ERC, advirtió este jueves de que su partido no garantiza ya su apoyo a Sánchez: "No, absolutamente no", espetó a las puertas del Congreso.
El recado electoral
El comunicado, el PSOE recuerda a los independentistas que el resultado de las elecciones del 23 de julio no fue bueno para ellos, ya que redujeron su fuerza en detrimento de un auge espectacular del PSC: "En las últimas elecciones generales, la sociedad catalana en particular, y la española en su conjunto, han apostado de manera amplia por un gobierno progresista que continúe la senda de diálogo, acuerdos y concordia iniciada hace cuatro años, y no por mirar al peor pasado sino por seguir construyendo juntos un futuro mejor".
Lo cierto es que el escenario que abre la exigencia independentista puede abocar a una investidura fallida a Sánchez y, por consiguiente, a una repetición de las elecciones generales que se celebrarían sí o sí el próximo 14 de enero. Pedro Sánchez tiene prisa por acudir a la investidura. Su núcleo de confianza, en conversación con este diario, reitera que desea que sea "cuanto antes". Pero el calendario es tozudo y los obstáculos cada vez más grandes.
El presidente del Gobierno en funciones afronta dentro de poco una semana horribilis que le ha hecho alejar su investidura hacia la segunda mitad del mes de octubre. El presidente se prepara para una marcha contra la amnistía "potente", como prevén sus colaboradores, el próximo domingo 8 en Barcelona. Y tan solo cuatro días después, el día 12, se celebra en Madrid el desfile del Día de la Fiesta Nacional. El líder del Ejecutivo está mentalizado para recibir una pitada monumental con todo tipo de insultos de coro y con la presión de los independentistas ahogándole. Es cierto que las conversaciones de Moncloa con los independentistas avanzan, según fuentes de ERC consultadas por Vozpópuli. Pero han encallado en lo más difícil.
La amnistía es aceptable para Sánchez
Por ahora, los equipos negociadores de Moncloa, ERC y Junts intercambian documentos sobre el encaje legal de la otra gran reclamación del independentismo: la amnistía. Moncloa busca espacio en la legalidad para darla a luz en el Congreso. El Gobierno hace caso omiso a los gritos en contra de la amnistía. Este lunes desmereció a través de su portavoz en Moncloa, Isabel Rodríguez, la concentración cocinada por Génova el dominog pasado.
La también ministra de Política Territorial en funciones recordó que los españoles ya hablaron el 23 de julio en las urnas y que "fueron más" quienes no quisieron un Gobierno del PP con Vox que quienes lo votaron. Esa es la legitimidad que siente Sánchez para ultimar la amnistía que se niega a pronunciar. El presidente abrió la semana pasada de manera definitiva la puerta a sacar adelante una hipotética ley de amnistía o de alivio penal. Y lo dijo de manera velada, cuando recordó que será "coherente con la política de normalización en Cataluña". Nadie en el PSOE sabe hasta dónde llegará.
kayser
¿Y aquí no hay nadie imputado?
kayser
De acuerdo
Milana bonita
Qué más necesita el ególatra de la Moncloaca para subirse los calzones y asumir que los psicópatas separatistas nunca tendrán suficiente para mitigar su enfermizo resentimiento...
parlando
Todo lo demás, amnistía, deuda pública que pagarán el resto de los españoles, fondos europeos que se llevará Cataluña "by the face", comisarios políticos, carguitos para "amiguitos del alma" un poquito matones y un bastante bufornes, todo lo demás ya está pactado. "Te doy el referéndum si lo llamas de otra manera". "Pues vale". Recordemos: el domingo es 1 de octubre, el día hiperventilado.
Alexander
Es obvio que Pedro Sánchez no puede dar todo los que le exigen los independentistas catalanes, ni lo que le van a exigir los independentistas vascos en los próximos años, por eso creo que es imprescindible que el PSOE y el PP lleguen a un acuerdo para reformar la Constitución de forma que esas dos regiones estén conformes con seguir formando parte del Reino de España. Por otra parte, es necesario elevar la vista hacia el futuro de nuestro país en el escenario internacional y empezar a elaborar un proyecto para la integración de España en una Europa federal, lo cual reforzaría nuestra seguridad ante las amenazas que van a proceder del otro lado del Estrecho de Gibraltar.
Alexander
Es obvio que Pedro Sánchez no puede dar todo lo que le piden los independentistas catalanes (ni lo s vascos, próximamnete)
jgarejula2
Votando más de media España al socialismo comunista y al separatismo a sueldo de vaya usted a saber quién.
Pablito 1
Los hechos pueden al relato. Es evidente que estamos atascados con el sanchismo sin saber muy bien como salir de estos atracos a la democracia. Podemos seguir hablando, pero sobran las palabras, hay pasar sin desfallecer al ataque. ¿Sánchez además de falto de moral, está sordo y no escucha a la calle? La amenaza está ahí, sin ocultarse, sin disimulos haciéndonos comulgar con piedras de molino.
Urenga
"Esa es la gran línea roja del PSOE." Espere, que me entra la risa.
maripepa
Otros partidos podrían pedir ilegalizar a Vox por enfrentar a los españoles. Calladitos estáis mejor.
estebanmc
Nada de la puntita: Toda entera
SonWeb
Se da por sentado que la política española se enfoca en priorizar los intereses partidistas sobre los de la ciudadanía. Los políticos saben que sus electores aceptan que sus cargos, salarios y prebendas sean lo primero antes que la defensa de la nación. sanchez está dispuesto a gobernar aliándose con la liga de la amnistía para los golpistas y el pacto sobre el referéndum de autodeterminación. feijoo está dispuesto a permitirlo si no gobierna él. Ambos desprecian un pacto de Estado que preserve la unidad y el compromiso con el derecho constitucional de las mayorías. Vergonzosa la furia ciega de sus votantes que aceptan la humillante derrota de España ante los separatistas antiespañoles con tal de evitar que sus adversarios políticos lleguen al poder. Ninguno de los dos candidatos a la investidura merece respeto moral. Ojalá la ambición independentista sea tan inflexible que la Justicia y la ley Constitucional impidan los infames pactos del sanchismo y provoquen nuevas elecciones.Se da por sentado que la política española se enfoca en priorizar los intereses partidistas sobre los de la ciudadanía. Los políticos saben que sus electores aceptan que sus cargos, salarios y prebendas sean lo primero antes que la defensa de la nación. sanchez está dispuesto a gobernar aliándose con la liga de la amnistía para los golpistas y el pacto sobre el referéndum de autodeterminación. feijoo está dispuesto a permitirlo si no gobierna él. Ambos desprecian un pacto de Estado que preserve la unidad y el compromiso con el derecho constitucional de las mayorías. Vergonzosa la furia ciega de sus votantes que aceptan la humillante derrota de España ante los separatistas antiespañoles con tal de evitar que sus adversarios políticos lleguen al poder. Ninguno de los dos candidatos a la investidura merece respeto moral. Ojalá la ambición independentista sea tan inflexible que la Justicia y la ley Constitucional impidan los infames pactos del sanchismo y provoquen nuevas elecciones.
arturo moreno
Sánchez nunca está contra las cuerdas, al contrario, se mueve muy bien por el cuadrilátero otorgando todo lo que le exijan terroristas y separatistas para permanecer cuatro años mas en el sillón presidencial.