El Gobierno ha vendido como el mayor éxito diplomático en 300 años un tratado internacional que no ha entrado en vigor y que ni siquiera se sabe si lo hará alguna vez. Se trata de un acuerdo fiscal suscrito con el Reino Unido que afecta a las relaciones de España con Gibraltar.
El Ministerio de Asuntos Exteriores ha dicho que es el primer tratado que firma nuestro país sobre Gibraltar desde Utrecht en 1713.
Sin embargo, es un tratado "Ad referéndum". Es decir, requiere la aprobación del Consejo de Ministros y el Parlamento, tal y como ha matizado el propio Josep Borrell.
Un papel
Fuentes consultadas por Vozpópuli aseguran que el mundo está lleno de acuerdos "Ad referéndum" que nunca llegan a la ver a la luz y que de momento lo que ha vendido Borrell a bombo y platillo es sólo un papel. Un documento, eso sí, electoralmente atractivo a poco más de mes y medio para las elecciones generales del 28-A.
"Trata de evitar que Gibraltar sea un foco donde haya una competencia fiscal desleal con el resto del territorio", ha dicho Borrell después de firmar el documento solo -sin presencia británica- pero con solemnidad.
El Ejecutivo ha enmarcado este acuerdo en la serie de medidas previstas por España ante el brexit. Y ha precisado que el supuesto tratado puede funcionar tanto si hay una salida ordenada del Reino Unido de la Unión Europea como si no.
El objetivo, según ha informado Exteriores, es reducir y eliminar el fraude fiscal, el establecimiento de unas reglas claras para resolver los conflictos de residencia fiscal de personas físicas y evitar la utilización de sociedades sujetas al régimen fiscal de Gibraltar que prestan servicio en España.
1.000 millones al año
España calcula que Hacienda deja de recaudar unos 1.000 millones de euros al año como consecuencia del régimen fiscal de la colonia. Gibraltar defiende que cumple con la regulación europea.
Este tratado, si alguna vez ve la luz, intentará regular conflictos de residencia de particulares -gibraltareños que residen en España pero tributan en el Peñón- y de empresas. Muchas compañías hacen lo propio.
El ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, dijo en enero que no puede darse por sentado que los memorandos que España y Reino Unido han firmado hasta la fecha en relación con el Peñón y el brexit sigan en vigor en caso de un brexit duro.