Bochorno. Pocas veces en el Parlamento un diputado concreto ha sido objeto de tantos insultos y chanzas por parte de varios grupos políticos como lo ha sido este martes Toni Cantó, representante de Ciudadanos. Los nacionalistas, aplaudidos por el PSOE, los independentistas y Podemos y sus confluencias han cargado duramente contra el diputado naranja por denunciar "adoctrinamiento" en las aulas catalanas a través de una iniciativa que ha sido tumbada por 164 votos en contra, 122 abstenciones y 34 votos a favor.
El PP se ha puesto de perfil y ha guardado silencio, no sin algún ataque furibundo contra Cantó que ha sido aplaudido incluso por diputados de Podemos. Ciudadanos sólo ha recibido el apoyo de los dos electos de Unión del Pueblo Navarro (UPN).
"Mente sucia", "tonto", "racista", "supremacista", "fundamentalista español", "Torquemada" o "ave carroñera" han sido algunos de los epítetos que los nacionalistas de PDCat y PNV y los comunes han dirigido contra Cantó. El calificativo de "racista" lo ha pronunciado el diputado peneuvista Aitor Esteban, al término de cuya intervención ha recibido también el aplauso de la dirección del Grupo Socialista, con Margarita Robles al frente. Esteban se ha negado a retirar el término "racista" del diario de sesiones, argumentado que el representante de Ciudadanos había aludido a una "diferencia de apellidos".
No gustaron a Esteban las palabras de Cantó criticando a los gobiernos del PP y el PSOE por haber pactado en otras épocas con "un gobierno catalán que gobierna para los García, Martínez, López, Sánchez, Rodríguez, Fernández, y así hasta los 33 apellidos más comunes en Cataluña". Apellidos que, sin embargo, dijo el diputado de Cs "están gobernados por un gobierno que está formado por Mas, Romeva, Turull, por Junqueras, por Forcadell y por la madre que los parió, por la madre superiora, la mujer de Pujol".
Cantó subió este martes a la tribuna para defender una moción consecuencia de una interpelación urgente que él mismo dirigió la semana pasada al ministro de Educación Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo. La iniciativa en cuestión instaba a "desarrollar el marco normativo para que la Alta Inspección Educativa, actuando de oficio, realice requerimientos e inspecciones en centros educativos, así como elabore informes sobre las decisiones que adopte la Administración educativa, en relación con la comprobación de los contenidos curriculares básicos y la garantía de igualdad de derechos de todos los alumnos, en particular, los derechos lingüísticos".
Además, emplazaba a que ese marco normativo sirviera para garantizar la "neutralidad ideológica y política de los centros docentes" y exigir "responsabilidades disciplinarias a directores y profesores por la realización de actuaciones de adoctrinamiento del odio nacionalista, con grave conculación de los derechos y libertades fundamentales básicos en cualquier democracia".
El PP presentó una enmienda de modificación que sólo apostaba por "reforzar la Alta Inspección" vigente, negando así a explorar una nueva regulación sobre la misma en la línea más proactiva defendida por Ciudadanos.
Por su parte, el PSOE manifestó que "no existen evidencias de que haya un problema generalizado de adoctrinamiento" en las aulas de Cataluña. Los socialistas acusaron a Ciudadanos de "querer convertir a la Alta Inspección en una especie de policía interna dentro del sistema docente". Para los "casos de acoso escolar" que había relatado Cantó desde la tribuna, el PSOE incidió en que "hay protocolos de intervención que ya se han activado".
Desde el grupo de Unidos Podemos-En Comú-En Marea, el diputado Joan Mena tachó el discurso de Cantó de "etnicista" y afirmó que "decir que la escuela publica catalana adoctrina es mentira". "En España adoctrinan las escuelas del Opus que usted apoyan con su abstención en los conciertos para segregar alumnos", señaló.
"El que ha vertido odio y sectarismo ha sido usted señor Cantó, a raudales. Lo que pasa es que usted no puede aceptar que otros piensen diferentes. El nacionalismo vasco y catalán no nació en la escuela, sí el nacionalismo español", sentenció Esteban (PNV).
Del PDCat, el diputado Jordi Miquel esgrimió que "la educación no es un instrumento político para nosotros, a diferencia de ustedes. Ustedes proponen vigilar las ideas políticas los profesores en Cataluña y eso es intolerante. Deje de perseguir a la gente en Cataluña", remachó.