Los jóvenes han adquirido un papel protagonista en la lucha contra el cambio climático. Pero no solo en las calles. Algunos también han conseguido llevar la voz cantante en las sucesivas cumbres del clima de la ONU. Al menos a la hora de divulgar sus mensajes en las conferencias y foros que se celebran en el marco de este tipo de encuentros.
Además, los hay que forman parte de las mesas de negociación. Pero, ¿tienen voto en las negociaciones o solo voz? Esta es la pregunta que se hacen las nuevas generaciones que han sido invitadas a participar en la Cumbre del Clima de Madrid 2019, un foro que contará con la participación de Greta Thunberg, la activista sueca de tan solo 16 años que se ha convertido en un referente para muchos de ellos.
Estudiantes, divulgadores científicos, emprendedores, youtubers, profesores recién licenciados... Vozpópuli ha hablado con varios jóvenes presentes en la COP25 para conocer su visión sobre el cambio climático. "Queremos seguir viendo las tortugas en el mar y no en un museo de Ciencias Naturales", reivindican.
José Luis Crespo tiene 25 años, es físico y lleva cerca de dos años estudiando climatología. Cree firmemente que hay que cortar emisiones de CO2. "Esta lucha la abanderamos todos. Son nuestros abuelos los que nos cuentan cómo eran las cosas antes y, por ello, estamos más concienciados de que están cambiando. Vemos que son distintas", dice.
Según Crespo, la gente tiene que entender que el cambio climático no es una cuestión ideológica. "Da igual que seas de izquierdas o de derechas, da igual tu estatus económico... La crisis climática nos afecta a todos y tenemos que tomar conciencia", considera.
En esa línea, celebra que una figura como Greta Thunberg esté "ayudando a interiorizar" el problema frente al "negacionismo", pero describe el escenario que rodea a la activista como "un fenómeno agridulce".
El 'fenómeno' Greta Thunberg
"Es una lástima que haya que tirar de argumentos populistas y viscerales para que la gente haga cosas de provecho y que no sea un científico el que les logre convencer a través de cifras reales", critica. "Pero vivimos en el mundo en el que vivimos y nuestros enemigos tienen armas aún más poderosas: ellos sí que son populistas y usan fake news", compara.
"Si hace falta que una chica haga performances como no coger nunca un avión solo para que la gente interiorice que coger un avión perjudica el clima, ya está haciendo un bien", zanja.
Tenemos que tratar de frenar las fake news. Hay que responder a cada comentario negacionista y para ello hay que informarse", dice Crespo
Crespo es el creador de QuantumFracture, uno de los canales de divulgación científica en Youtube con más seguidores, casi dos millones de personas. "Tenemos que tratar de frenar las fake news. Hay que responder a cada comentario negacionista y para ello tenemos que estar correctamente informados. Más que nada porque nuestros errores son los que más alimentan a los negacionistas, así que hay que contestar ciñéndonos a la ciencia", invita.
Llaman a la 'justicia intergeneracional'
Álvaro Alfaro, del movimiento '#WeAreAction' y coordinador de la conferencia de la Juventud (COY15), advierte que el hecho de tener voz en las cumbres muchas veces no se traduce en tener voto.
"Es necesario sentarse en la mesa de negociación en igualdad de condiciones. La crisis climática es de todas las generaciones. Los niños y la tercera edad son los que más la padecen y la intergeneracionalidad no se debe reducir solo a los paneles y talleres", apunta este joven profesor chileno.
A sus 16 años, la también chilena Julieta Martínez se pasea y participa en las conferencias de la COP25. El año pasado fundó Tremendas, una plataforma para inspirar a las niñas a descubrir su vocación, y ha venido a Madrid gracias al apoyo de la red de emprendedores e innovadores sociales de Ashoka.
Acostada en mi cama haciendo comentarios por Twitter no voy a solucionar nada", señala la chilena Julieta Martínez
"Los límites están solo en la cabeza y las jóvenes deben aprovechar su talento en artes, ciencias, tecnología y todas las demás áreas para darle un sentido y vincularlo a una causa social", opina. Dice que cada día piensa en su hermana pequeña. "Tengo que ser parte del cambio, no puedo seguir esperando. Acostada en mi cama haciendo comentarios por Twitter no voy a solucionar nada", señala.
Ha cambiado su rutina diaria con respecto al reciclaje, a la ropa y al abuso de la carne. "Admiro a Greta Thunberg. A veces sus ideas son tachadas de radicales, pero es lo que necesitamos porque tenemos que trasformar nuestra realidad. Estos cambios son los que más van a ayudarnos a la larga", considera la joven chilena. "Hay más Gretas, hay Antonias, hay Cotes, hay Julietas... Hay niñas en todo el mundo dando ejemplo y sus voces se tienen que conocer en el mundo entero", añade sonriente.
"Ni un grado más, ni una especie menos"
Un año más, 17, tiene Alejandro Quecedo del Val, actual presidente de la junta infantil y juvenil de la ONG SEO/Bird Life. Estudia Bachillerato en el IES Cardenal López de Mendoza de Burgos y le gustaría matricularse en Filosofía. "No queremos ni un grado más, ni una especie menos. El cambio climático implica también la pérdida de biodiversidad y va a acabar con el plantea tal y como lo conocemos", advierte.
Quecedo opina que la crisis medioambiental no es responsabilidad de la juventud ni de los mayores, sino una "responsabilidad histórica en la que solo la justicia intergeneracional nos hará avanzar". "Este concepto no es nuevo. Ya se hablaba de justicia intergeneracional en el siglo XVII. Sin embargo, lleva mucho tiempo en crisis debido a las políticas cortoplacistas", afea.
La COP25, dice, va a ser un punto de inflexión que va a cambiar radicalmente la percepción en la lucha contra el cambio climático. "Si vamos a salir con un acuerdo ambicioso está por ver, pero lo que está claro es que necesitamos el apoyo de toda la sociedad civil", señala.
Sobre Greta Thunberg, el joven burgalés cree que ha servido como "elemento disruptor" para poder el debate en torno al clima sobre la mesa. "El cambio climático es nuestro mayor problema, pero también nuestra mayor oportunidad", concluye.