La dirección de Podemos no ha conseguido evitar la grave crisis interna abierta entre los actuales concejales del partido morado en el Ayuntamiento de Madrid y el secretario general de la formación en la ciudad, el exJemad Julio Rodríguez.
Aunque la alcaldesa Manuela Carmena puso como condición para repetir como candidata que los partidos no copasen su candidatura, la dirección municipal de Podemos puso en marcha unas primarias para elegir a los futuros acompañantes de viaje de la primera edil en las elecciones de mayo de 2019.
El orden de los puestos de esa lista llevaba semanas desatando tensiones internas entre quienes ocupan actualmente los cargos en el Consistorio y a los que Carmena quiere -sí o sí- en su futuro equipo, y aquellos miembros del partido afines al exJemad que nunca han ejercido funciones públicas como Maby Cabrera o Bruno Estrada.
Esas primarias fueron percibidas como una maniobra para presionar a Carmena y tratar de condicionar el orden de su candidatura con el orden de la lista surgida. Aunque de puertas para afuera la dirección hablaba de darle "todas las facilidades" para que se sienta "cómoda".
Los actuales ediles decidieron a última hora de este domingo descolgarse del proceso interno y lo fiaron todo a la integración en la futura plataforma de Carmena, donde sí se someterán al proceso participativo con el que los ciudadanos podrán refrendar la lista que proponga la alcaldesa.
Desde el entorno de los concejales consideran que el exJemad ha tratado de "jugársela" a la primera edil con tal de copar hasta 12 puestos de la futura candidatura. Las primeras conversaciones se articulan en base a los veinte asientos que tienen ahora en el Palacio de Cibeles. Entre esos puestos deben caber los independientes que elija la alcaldesa, así como los representantes de Izquierda Unida o Equo.
Cuando Rita Maestre y los otros concejales amagaron hace poco menos de un mes con no inscribirse en el proceso interno, fue la dirección estatal quien trasladó que esa decisión les situaría "fuera de Podemos". De hecho, el reglamento interno del partido marca que cualquier aspirante a cargo público debe pasar por primarias.
En aquel momento, la guerra entre sectores consiguió ser sofocada a última hora. Y los ediles se inscribieron en las primarias internas del partido. Pero este domingo todo saltó por los aires. Eso sí, en esta ocasión, la dirección estatal, a través del secretario de Organización Pablo Echenique, evitó aclarar si podrían ser expulsados tras la decisión. Fuentes del partido descartan, por el momento, medidas contra ellos.
El escenario preelectoral y la necesidad de que Carmena revalide el Ayuntamiento para salvar las aspiraciones de los morados en 2020 parece haber hecho optar por la prudencia, ante el riesgo de ser acusados de una nueva purga interna. Eso sí, el número dos orgánico de Podemos aseguraba que aunque sean concejales, no podrán hablar en nombre de Podemos.
Ellos, en cambio, se reafirmaron a través de un comunicado en que siguen comprometidos tanto con el proyecto de Carmena como con su partido.