Enviaban cebras españolas enfermas a Dubai con documentación falsificada y vendían animales en territorio nacional en pésimas condiciones sanitarias. Los agentes del SEPRONA de la Guardia Civil han detenido a tres personas y están investigando a otras tres en el marco de la 'operación Quagga'. Para conseguir los documentos necesarios contaban con la colaboración de una veterinaria y hacían pasar muestras de sangre de burro en buen estado por sangre de cebra, según informa el Instituto armado.
La red vendía también en Murcia, Ávila, Cádiz, Sevilla y Santa Cruz de Tenerife otras especies como aves, lobos, linces europeos o nutrias, todos ellos en estado pésimo.
A los detenidos se les imputan los delitos de falsificación de documento, estafa, maltrato animal y pertenencia a grupo criminal relacionado con la venta y movimiento de animales a nivel nacional a internacional.
Las investigaciones sobre esta operación comenzaron en febrero de 2015 por una denuncia que alertaba de las irregularidades de la explotación registrada que se dedicaba a la compraventa de animales y que podía estar maltratando a los mismos. Los agentes comprobaron que se usaba sangre de burros en buen estado para lograr los certificados sanitarios de salida al extranjero, haciéndola pasar por la sangre de las cebras enfermas que posteriormente se exportaban. Los documentos, elaborados por el cabecilla del grupo, eran firmados por una veterinaria sin ningún tipo de control.
Los agentes también comprobaron que se habían vendido animales enfermos que fallecieron posteriormente o se les había sacrificado mediante maltrato y sin eutanasia, siendo después incinerados en las propias instalaciones.