Madrid está cerrado, pero respiremos al aire libre sin dejar atrás la gastronomía. Con todas las precauciones por nuestra parte como comensales y también por la de estos cuatro restaurantes que, además de un comedor interior, cuentan con terraza para disfrutar de sus especialidades. Es el momento de aprovechar el clima aún benigno de estos días otoñales.
El restaurante de moda... y más
Lo último en Madrid se llama Bel Mondo y, desde luego, hace honor a su nombre. Novecientos metros cuadrados entre comedor interior y una terraza para 150 personas que resulta ser lo más impactante que se ha visto durante años en esta ciudad. Una trattoría tradicional italiana en pleno barrio de Salamanca- estuvo Loft 39-, en un impresionante y modernísimo local de distintos ambientes con una decoración espectacular- lámparas de Murano, etc.- y con la terraza como joyita de la corona, cuajada de plantas naturales.
Perteneciente al grupo francés Big Mamma ha llegado a Madrid para demostrar que una extraordinaria decoración, un ambiente animado y una atención amable es plenamente compatible con una estupenda cocina. Pues ya lo ha hecho. Y a buenos precios (unos 35 euros, sin pasarse).
Apuesta por el delicioso carpaccio de vaca aliñado, alguna pizza de masa reposada durante 36 horas y no te pierdas la “Gran Carbonara”, espaguetis con guanciale presentados en un queso pecorino romano. De postre, recuerda la Paulova, primorosamente hecha, aunque a su manera. Reserva con antelación porque está lleno hasta la bandera.
Apuesta por las hamburguesas
La terraza del restaurante Bocanegra (C/ Marqués de Cubas, 2), enclavado en el corazón de Madrid, es una de las más agradables de la ciudad. Un jardín exterior y un espacio climatizado enclavado en el emblemático palacio del Marqués de Casa Riera, donde probar ahora una nueva carta de hamburguesas inspirada en las leyendas de los piratas (de ahí el peculiar nombre del restaurante) con distintas propuestas, desde el Corsario (huevo, bacon…) al Bucanero (a base de pollo y queso de cabra) o la Perla Negra, con pimientos y salsa americana. No falta una versión clásica de este bocadillo tan americano. Además, una carta de cocina mediterránea en un bonito local decorado en verdes y turquesas. Precios mesurados.
Olimpo gourmet
A pesar de que por las medidas de seguridad han reducido el aforo de su terraza, hay que conocer la tienda de delicatessen Coalla (C/ Serrano, 203), el nuevo paraíso gourmet madrileño. Un local de 400 metros cuadrados divididos en dos plantas donde foodies, aficionados y otras especies amantes de la gastronomía encontrarán todo aquello que les hará felices. Desde una variedad espectacular de vinos (1.500 referencias con destilados) a laterío de altura, sección de quesos y embutidos, aceites y vinagres, patés. salsas…
Perteneciente a un grupo asturiano que posee establecimientos en Gijón y en Oviedo, en todo el local hay zonas de degustación. En su terraza se puede disfrutar de una carta específica elaborada por el cocinero José Antonio Campoviejo (Restaurante El Corral del Indiano, Arriondas), que cuenta con una estrella Michelin o bien comprar cualquier producto y/o vino que nos apetezca en la zona de tienda y degustarlo in situ. Cierran a las 22,30.
Montalbano a la mesa
Si te gusta la cocina siciliana tu lugar está en Premiata Forneria Ballarò. Y si eres seguidor del comisario Montalbano por más razones aún. En una agradabilísima terraza puedes disfrutar de los menús temáticos inspirados en las novelas de Andrea Camilleri quien dio vida al policía- también convertidas en serie televisiva- y reflejó en ellas esos deliciosos platos tradicionales propios de la isla mediterránea.
Una cocina auténtica y de estupenda factura que ahora ofrece "El Menú de Adelina", la cocinera del comisario. No dejes de probar sus arancini de carne (bolas de arroz rellenas) o su pasta ‘Ncasciata, acompañada de tomate natural y queso pecorino sardo. También unos salmones fritos con falso risotto de hinojo y la cassata siciliana, que no es helado como en el resto de Italia, sino una rica tarta a base de mazapán y ricotta Todo, al estupendo precio de 35 euros (sin bebidas).
El restaurante, enclavado en pleno Chamberí está encabezado por Rafa Vega (fundador del mítico Piú di Prima) y el chef Angelo Marino, creador de La Taverna Siciliana. Un lugar único donde disfrutar a fondo de un buen ambiente y una primorosa cocina tradicional siciliana, también con una atrayente carta.
