El Gobierno británico, liderado por la conservadora Liz Truss, ha dado marcha atrás en su plan de reducir el tramo más alto del impuesto sobre la renta del 45% al 40%, una medida que desplomó la libra esterlina hasta situarla a su nivel más bajo desde 1985 y ha encontrado oposición en los medios y ha sacudido las filas del propio Partido Conservador.
El plan fiscal presentado por Kwarteng el pasado 23 de septiembre había creado convulsiones en los mercados ante las dudas sobre la capacidad de Londres de asumir la deuda pública generada por la bajada de impuestos, ante la ausencia de previsiones de crecimiento.
El ministro de Economía del Reino Unido, Kwasi Kwarteng, anunció la retirada de la medida esta mañana, menos de un día después de que la primera ministra la defendiera en una entrevista para la BBC -aunque la atribuyó directamente a Kwarteng-. "Está claro que la abolición de la tasa del 45 % se había convertido en una distracción en nuestra misión primordial de abordar los desafíos de nuestro país. Como consecuencia, no seguiremos adelante con su abolición. Lo entendemos, y hemos escuchado", señaló el ministro en un comunicado.
Esto supone un giro de ciento ochenta grados en el plan de los conservadores que sus votantes han calificado como "embarazoso", "humillante" o "patético", según recoge Efe. Este cambio de dirección pone aún más presión sobre Truss y Kwarteng mientras el país atraviesa una etapa de inestabilidad política que se salda hasta el momento con una cifra de cuatro primeros ministros en tres años.
En una entrevista para BBC Radio, Kwarteng ha declarado que no considera dimitir. Preguntado por Reuters, un abogado conservador ha opinado que el ministerio de Economía está "muy debilitado".
Descontento entre la militancia torie
El comunicado del ministro de Economía se produjo horas antes del inicio del congreso anual del Partido Conservador -que durará hasta el miércoles-, en el que la "humillación" del Gobierno inquieta a sus electores. "Me temo que esto nos va a costar las próximas elecciones", declara a Efe Catherina Fitzpatrick, empresaria, "sólo espero que la gente reconozca la humildad demostrada por Kwarteng al echar marcha atrás" en la bajada de los impuestos a los ricos, señala.
"Es imposible que ganemos los comicios de 2024", manifiesta Owen Thomas, estudiante. Por otro lado, Cynthia Musgrave, jubiliada, lamenta el cambio de intenciones de la primera ministra "solo por las presiones de la prensa", especialmente, según ella, de "los izquierdistas de la cadena pública BBC".
Truss, que se impuso a Rishi Sunak en las elecciones internas al liderazgo conservador, se dirigirá a la militancia el 5 de octubre, mientras que el martes lo harán los ministros de Exteriores, James Cleverly, e Interior, Suella Braverman.
Desconfianza en la primera ministra
Con todo, algunos parlamentarios conservadores han escrito ya cartas de no confianza en la primera ministra al llamado comité 1922 -que se encarga de organizar las elecciones primarias-, aunque se necesitarían al menos 54 (un 15 % del grupo parlamentario) para forzar una moción de censura.
"También podría ser que, dentro de un tiempo, los diputados consensuaran un candidato para sustituirla y la desbancaran sin necesidad de celebrar otras elecciones" internas, dice a Efe el conocido comentarista político británico Andrew Marr.
Marr, antiguo periodista de la BBC, cree que, aunque el Gobierno de Liz Truss "pueda durar algún tiempo", sobre todo si convencen las medidas para el crecimiento que planean presentar, la suerte está ya echada. "Han perdido las próximas elecciones", coincide.
El alcalde conservador Ben Houchen, de Tees Valley, en el noreste de Inglaterra, dijo que entendía el principio de recortar los impuestos, pero que una medida de este tipo durante una crisis del coste de la vida para millones de personas había sido "muy ingenua".
Los laboristas recortan distancia de cara a las próximas elecciones
El Gobierno de Truss afronta este congreso con las encuestas en contra, pues su mal comienzo ha otorgado al Partido Laborista de Keir Starmer su mayor ventaja en veinte años, con un 54 % del apoyo frente al 21 % de los "tories" en un sondeo reciente.
vallecas
No sean ridículos, contablemente pasar del 45 al 40 no tiene casi repercusión. Lo que le achacan a la Sra. Truss es su torpeza por no prever que incluso en UK se desencadenaría una protesta por bajar los impuestos a "los ricos". El auténtico problema de UK es haber salido de la Unión Europea. Con el 51 % de los votos han destrozado su presente y futuro.
Moltke
"plan fiscal", querer endeudarse más no es ningún plan y menos aún fiscal.
Auraz
Beltxa: Díaz Ayuso siempre ha dicho que Madrid es de todos los españoles. Nadie en Madrid piensa otra cosa. En Madrid todo el mundo es bienvenido. Lo que os pasa a los de izquierdas es que de tanto manipular lo entendéis todo al revés; de tanto mentir ya no sabéis llevar el hilo de lo cierto o lo inventado.
Beltxa
Perdonaaaa que el nacionalismo es un cáncer, pues cuando empezamos a terminar con el nacionalismo madrileño, lo impulsa IDA, suena mucho a PNV y la antigua CIU