El presidente interino de Egipto, Adli Mansur, se reúne este lunes con los ministros de Defensa, Abdel Fatah al Sisi, y del Interior, Mohamed Ibrahim, para analizar la situación en la península del Sinaí, donde han muerto al menos 24 policías y otros tres han resultado heridos graves cuando su convoy fue asaltado por desconocidos cerca del paso fronterizo de Rafah, en uno de los peores ataques en los últimos años sobre las fuerzas de seguridad en el Sinaí.
Los policías, que viajaban en microbuses, fueron atacados con proyectiles RPG, aunque, según explicaron a Efe fuentes de la seguridad, los hombres armados ejecutaron con disparos a los agentes tras hacerles bajar de los vehículos. Además, un general de la policía falleció en Al Arish, capital del norte del Sinaí, por los disparos de un francotirador cuando se subía a un vehículo blindado, según la agencia estatal de noticias Mena.
Las autoridades han ordenado el cierre del paso de Rafá, que comunica Egipto con la franja palestina de Gaza, tras los ataques, según los medios estatales.fueron atacados con proyectiles RPG, aunque, según explicaron a Efe fuentes de la seguridad, los hombres armados ejecutaron con disparos a los agentes tras hacerles bajar de los vehículos.
Según el portavoz presidencial, Ahmed Muslimani, la cúpula de la seguridad abordará junto al mandatario provisional la situación global en Egipto, con especial énfasis en la escalada de la violencia en el Sinaí.
Egipto está sumido en una ola de violencia desde el pasado miércoles, cuando la policía desalojó dos acampadas en El Cairo de manifestantes islamistas que reclaman el regreso al poder de Mohamed Mursi, depuesto el pasado 3 de julio por un golpe militar.
Los incidentes se han sucedido en las últimas semanas en la península del Sinaí, convertida en un foco de inestabilidad y escenario de ataques contra las fuerzas de seguridad y gasoductos, así como de actos de contrabando y secuestros.