El salmón es uno de los pescados más consumidos en los hogares, en parte por su contenido en proteínas y ácidos omega 3, y en parte por la gran variedad de formas para consumirlo. Pero, ¿sabías que existen cinco tipos de salmón?
El salmón real es el que más grasas tiene; el salmón rojo tiene menos grasas pero un gran sabor; el salmón plateado tiene un sabor más suave; el salmón jorobado es el más delicado, y a penas se consume; y el salmón chum es el que menos grasa tiene y normalmente el escogido para elaborar sushi.
Sea del tipo que sea, es un alimento con grandes propiedades para la salud. Por ejemplo, de media, unos 85 gramos de salmón tienen 133 calorías, cinco gramos de grasa, 22 gramos de proteína y cero carbohidratos.
Pero además, también proporciona el 82% de la cantidad de vitamina B12 que el organismo necesita; el 46% de selenio; el 23% de fósforo; el 4% de vitamina A; o el 3% de hierro. Asimismo, el salmón es un gran aliado para:
La salud del corazón
Una alta ingesta diaria de DHA y EPA (ácidos grasos que se encuentran en el pescado) ayudan a disminuir el riesgo de sufrir un ataque al corazón. Así, cuanto mayores sean los niveles de ácidos grasos omega 3 que se encuentran en la sangre, menor será la incidencia de insuficiencia cardíaca.
Según el doctor William S. Harris, director de la Universidad de Dakota del Sur y del Instituto de Nutrición e Investigación de Enfermedades Metabólicas de Sioux Falls, “cuanto mayores sean los niveles de ácidos grasos omega 3, menor será el riesgo de enfermedades del corazón y de muerte, y viceversa”.
Enfermedad de tiroides
Se ha demostrado que el selenio es un componente necesario para la función apropiada de la tiroides, por lo que el consumo de salmón ayuda a las personas que son deficientes en este compuesto, y que por lo general tienen problemas de tiroides. Además de aumentar los niveles de selenio, estás personas podrán regular su peso y reducir el riesgo de diabetes o enfermedades cardiovasculares.
Beneficios mentales
Los ácidos grasos omega 3 ayudan a disminuir la agresividad, impulsividad y la depresión en los adultos. Además, esta disminución es más acusada en niños que tienen trastornos asociados al estado de ánimo o problemas de conducta, así como con algún tipo de trastorno por déficit de atención con hiperactividad.
En este sentido, un estudio realizado en Reino Unido desvela que los niños nacidos de mujeres que consumieron unos 340 gramos de salmón a la semana durante el embarazo, tiene un coeficiente intelectual más alto y mejor, además de habilidades motoras y de comunicación social más desarrolladas.
No obstante, debido al contenido en mercurio, se trata de un alimento que las mujeres embarazadas deben controlar durante la gestación.
