La patronal de las televisiones privadas, UTECA, se enfrenta desde hace unas semanas a un cisma interno de difícil solución. Una parte de sus miembros ha puesto en marcha una asociación paralela con el objetivo de defender los intereses de los canales más pequeños de la TDT, los que tratan de sobrevivir a la sombra de los dos gigantes del sector, Atresmedia y Mediaset, que acaparan el 86,5% de la cuota de mercado. Los responsables de UTECA, a sabiendas de que se mueven en un terreno minado, han optado por templar gaitas y han animado a ‘los rebeldes’ contra el duopolio a seguir trabajando desde la unidad. Ahora bien, han lanzado un mensaje a las televisiones autonómicas y dejado claro que sus problemas no están causados por los dos operadores dominantes del mercado, sino por su elevado nivel de gasto.
Tal y como detalló este periódico el pasado sábado, la Asociación Española de Televisiones Privadas Digitales Terrestres, por un lado, y la federación de televisiones autonómicas (FORTA), por otro, preparan desde hace unos meses una batería de acciones con la que pretenden poner coto al poder de Atresmedia y Mediaset en la TDT.
A la vista de esta situación, el lobby que ha defendido tradicionalmente los intereses de las cadenas privadas ha optado por mantener una postura diplomática con sus ‘socios díscolos’ -13TV, DKiss, Real Madrid TV, Vocento y Unidad Editorial- y les ha pedido que trabajen desde la unidad con el resto de los operadores, incluidos los dos grandes.
Con respecto a FORTA, la patronal de las cadenas comerciales ha sido menos sutil, pues considera que el problema de sus miembros no radica en su escasez de ingresos publicitarios, sino en que la reducción de consignaciones presupuestarias que han sufrido durante los últimos años no ha estado acompañada de un ajuste de sus costes de producción, “algo que sí han hecho las televisiones privadas durante la crisis”.
Frente en la CNMC
Cabe recordar que la federación de canales autonómicos pidió hace unas semanas por escrito al Gobierno que ponga a disposición de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) las herramientas necesarias para hacer cumplir la normativa vigente a Atresmedia y Mediaset, los dos operadores que acaparan la mayor parte de los ingresos del sector y que han vulnerado algunos de los compromisos (o condiciones) que adquirieron en el momento en que se autorizaron las fusiones Telecinco-Cuatro y Antena 3-La Sexta.
“La situación actual en el mercado publicitario en televisión de duopolio de facto es casi insostenible para el resto de operadores y, el panorama futuro, ya sin ningún compromiso de sus operaciones de concentración al que someterse, será más perjudicial porque la estrategia de ambos será acaparar aún más inversión publicitaria mediante acuerdos con terceros canales a incorporar en sus paquetes (de pago y/o abierto)”, precisaba el documento.
Los representantes de UTECA siempre han manifestado que la crisis de las televisiones autonómicas no está causada por su posición en el mercado, sino por su enorme estructura
Siempre que los representantes de UTECA han sido preguntados en algún foro público sobre la situación de las televisiones públicas, han respondido con un mensaje claro: su crisis no está causada por su posición en el mercado, sino por la enorme estructura que mantienen.
Sin ir más lejos, TV-3 gasta anualmente más de 220 millones de euros en mantener a su plantilla, mientras que RTVE, 380 millones. Plantear despidos en sus redacciones tradicionalmente ha implicado una furibunda reacción sindical, lo que ha ocasionado reticencias en las Administraciones públicas de las que dependen estos medios de comunicación.
Vuelta de la publicidad a RTVE
Otra de las medidas que serviría para reducir la cuota de mercado de Atresmedia y Mediaset es la vuelta de la publicidad a Televisión Española, defendida por UGT en el plan estratégico que presentó la semana pasada para la corporación.
UTECA difiere de las conclusiones del sindicato porque entiende que los problemas financieros de RTVE residen en sus gastos más que en sus ingresos, por lo que un hipotético retorno de los anuncios a sus canales, dado que su share es bastante inferior al de 2010, "conllevaría unos ingresos menores que los obtenidos con las aportaciones que hacen, a través de un canon obligatorio, los operadores privados y las compañías de telecomunicaciones".
Consciente de que maneja un material altamente inflamable, UTECA declina profundizar sobre el cisma que han abierto los pequeños operadores de la TDT. Ahora bien, fuentes de los dos principales grupos de televisión aseguran que la situación de estos empresarios no es peor que la que vivieron Telecinco y Antena 3 en la década de 1990, cuando se enfrentaban a una TVE que hasta entonces había tenido el monopolio del sector y encadenaron varios ejercicios con fuertes pérdidas económicas.