A Leopoldo González-Echenique no le salen las cuentas. Acuciado por las presiones de los sindicatos, cuestionado por parte del consejo de administración y cada vez más criticado por un sector del Partido Popular, el presidente de Radiotelevisión Española (RTVE) tiene por delante la compleja tarea de sacar de la quiebra a la corporación. Semanas atrás Hacienda rescató al ente, que rozaba la causa de disolución al acumular 716 millones de pérdidas, gracias a una inyección de 130 millones de euros a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi). Pero esto no es suficiente, ni mucho menos. En este contexto, en el sector ha vuelto a sorprender que, a pesar de sus penurias, RTVE acaba de hacerse con los derechos de emisión del fútbol sala.
Fuentes de la casa explican a Vozpópuli que las dos únicas opciones para superar los gravísimos problemas económicos del ente son un aumento de la partida presupuestaria de 2015 o un cambio importante en la ley de financiación. Se trata, en cualquier caso, de recibir más dinero. De momento, lo primero está descartado por parte del Gobierno y lo segundo sigue estancado en un dilatado proceso de negociación con el Ejecutivo. El partido gobernante tiene en su mano aumentar la aportación directa para RTVE en los próximos Presupuestos Generales del Estado (PGE). Sería la forma más sencilla, claro está, de salvaguardar el futuro de la corporación. Pero son tiempos de austeridad y el Gabinete tiene otras prioridades. Salvo sorpresa mayúscula, no habrá incremento de esta cantidad.
El pasado año el Gobierno congeló la aportación directa para RTVE, de 292 millones, tras sendos recortes del 36% en 2012 y del 14% en 2013
En 2014, la partida para RTVE en los presupuestos fue de 292,7 millones de euros, justo los mismos que en 2013. En las cuentas públicas de 2012 el Gobierno del PP recortó la friolera de 204 millones para el ente público, lo que suponía un 36,5% de la cantidad gastada en 2011. El año siguiente, en los PGE de 2013, recortó 50 millones de euros (14%). Tras el mencionado rescate de finales de junio, con la aportación de 130 millones de Hacienda y el compromiso de más recortes para ahorrar por parte de Echenique, resulta sencillamente impensable que ahora el ministerio dirigido por Cristóbal Montoro vaya a aumentar la aportación.
El probable cambio legal
Así las cosas, todo apunta a cambios relevantes en la ley de financiación de la corporación, que incluiría, como adelantó este diario, una nueva forma de cobrar las tasas a las empresas de telecomunicaciones. La ley de financiación de RTVE, aprobada en 2009, obliga a las operadoras a pagar el 0,9% de sus ingresos brutos a la corporación. De hecho, en 2012 entre las empresas de telecomunicaciones y las cadenas de televisión privadas aportaron 217,35 millones para financiar RTVE. De esa cantidad, 155 millones provenían de las telecos. El principal cambio que se atisba consistiría en que el Ejecutivo pagaría a RTVE las cantidades estimadas por las tasas y luego se las cobraría a las telecos. O sea, el Gobierno adelantaría el dinero para facilitar la financiación del ente. Con el actual sistema de cobro se producen grandes retrasos en los cobros, explican desde los sindicatos.
La duda estriba ahora en saber si el PP querrá embarcarse en un cambio normativo a estas alturas de legislatura. Sobre todo porque una mejora de las condiciones de RTVE podría irritar a las televisiones privadas
El propio Echenique ha reconocido en sede parlamentaria que se negocia con el Ejecutivo en esa dirección. Esta misma semana el director de TVE, José Ramón Díez, recién llegado al puesto, ha dicho que "hay que perfeccionar la financiación de RTVE". Pero la duda estriba ahora mismo en saber si el PP querrá embarcarse en un cambio normativo a estas alturas de legislatura. Sobre todo teniendo en cuenta que una mejora de las condiciones de RTVE podría irritar a las televisiones privadas, cuyas relaciones con el Gobierno no son las mejores en estos momentos como consecuencia del apagón de canales de la TDT ordenado por el Ministerio de Industria el pasado mayo.
Tal y como se comprometió al recibir el rescate de Hacienda, Echenique está en la tesitura de lograr ahorrar más y más. Por ahora, ha ofrecido a Montoro un recorte de 50 millones de euros que ya incluye ahorros acordados en el pasado. Las opiniones en el seno de la casa con contrapuestas. Los sindicatos y varios consejeros apuestan por la inmediata vuelta de la publicidad a RTVE como única solución plausible. Otro sector en la corporación, más en consonancia con las políticas del Ejecutivo, apuesta por la solución drástica de aplicar más recortes a la plantilla. De momento, Echenique parece descartas ambas opciones.
No hay dinero, pero...
Y, pese a todo lo descrito, RTVE sigue gastando en la adquisición de derechos deportivos. Este miércoles la corporación anunció que retransmitirá los partidos de fútbol sala de las dos próximas temporadas tras pagar una cantidad por ahora desconocida. La emisión de la Champions League, competición para la que aún tiene los derechos de la próxima temporada, cuesta a la corporación 35 millones de euros al año. Además, el pasado mayo se supo que el ente gastará hasta 40 millones de euros en partidos de la Selección de fútbol. En concreto, emitirá los partidos de clasificación para la Eurocopa de Francia 2016 y el Mundial de Rusia 2018. Gastos, todos ellos, que enfurecen a las televisiones privadas, que denuncian que la radiotelevisión pública juega con ventaja.
Para colmo de males, RTVE está cosechando en los últimos meses algunos de los peores datos de audiencia de su historia.