Las principales marcas alemanas, Volkswagen, Audi, Porsche, BMW y Mercedes-Benz, acordaron de forma secreta cuestiones relacionadas con la técnica, costes, suministradores e, incluso, la limpieza de las emisiones de gases en los vehículos diesel. Así lo asegura el semanario alemán Spiegel, que también afirma que Volkswagen y Daimler-Mercedes habrían presentado a las autoridades de defensa de la competencia sendos documentos en los que se "autodenunciaban" con el fin de limitar el pago de posibles multas.
De acuerdo con la información de Spiegel recogida por Efe, podría tratarse de uno de los mayores cárteles en la historia económica de Alemania, en el que habrían participado todos los grandes fabricantes automovilísticos alemanes: Volkswagen, Audi, Porsche, BMW y Daimler, según el escrito de alegaciones presentado por Volkswagen.
Acordaron la técnica adecuada para la limpieza de las emisiones de gas y de este modo sentaron las bases para la crisis actual que atraviesa el diesel, añade Spiegel. Además, discutieron sobre el tamaño de los depósitos para el AdBlue, disolución de urea utilizada para reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) causadas por los escapes de los motores diésel.
Los depósitos grandes hubieran sido demasiado caros, por lo que las empresas automovilísticas alemanas acordaron depósitos pequeños en los que la cantidad de AdBlue llegaba a ser en un momento dado insuficiente para limpiar las emisiones, así que sólo era posible engañar.
También hubo acuerdos de las cinco empresas, que entre ellas se denominaban "el círculo de los 5", relacionados con cuestiones como las cubiertas de los descapotables, la elección de suministradores o la fijación de costes de componentes.
Según Volkswagen Audi y Porsche también habrían participado en el cártel y Daimler también se ha "autodenunciado". Las autoridades de vigilancia de cárteles tuvieron señales de estos acuerdos en verano del año pasado porque en una investigación sobre posibles acuerdos de precios del acero se investigaron las oficinas de Volkswagen.
Los investigadores encontraron entonces indicios de acuerdos ilegales en la industria automovilística. Dos semanas después Volkswagen hizo la "autodenuncia" en las autoridades de defensa de la competencia y le siguió Daimler con un documento similar.