El Banco Europeo de Inversiones (BEI) ha decidido no conceder más préstamos a Volkswagen al no descartar que parte de un crédito de 400 millones de euros concedido en 2009 a la compañía alemana pueda estar relacionado con el escándalo de la manipulación de las emisiones de gases contaminantes. Su presidente, Werner Hoyer, ha señalado que el banco está "asombrado, decepcionado y preocupado" por las alegaciones de "un comportamiento inadecuado y posiblemente fraudulento de Volskwagen".
Explico que el BEI efectúa su propia investigación de un posible vínculo de la manipulación de motores diésel EA 189 para trucar las emisiones de gases nocivos por parte del fabricante automovilístico con los préstamos concedidos por el banco. Una investigación que no puede descartar que haya un vínculo entre parte de un préstamo de 400 millones de euros concedido en 2009 a Volkswagen que ha podido ser utilizado en el desarrollo del fraude descubierto el pasado mes de septiembre en Estados Unidos, por lo que ha decidido suspender momentáneamente cualquier nuevo préstamo a Volkswagen.
Una mala noticia para el grupo alemán en las mismas fechas que llega desde Estados Unidos la negativa de las autoridades de aprobar el plan de actuación presentado para reparar los motores diésel detectados como fraudulentos a raíz de la investigación iniciada en los últimos meses de 2014. El Consejo de Recursos del Aire de California (CARB) señaló que las propuestas de Volkswagen son deficientes y no cumplen los requisitos legales necesarios para que los vehículos afectados puedan ser certificados como eficientes.
Según el organismo estadounidense, el plan ha sido rechazado por no describir específicamente las reparaciones en su plan de llamada a revisión de manera que permita a el CARB evaluar si podrían ser efectivas o incluso técnicamente posibles y porque los planes propuestos no responden de forma suficiente a los impactos sobre el motor, la operación en conjunto del vehículo y todas las tecnologías de control de emisiones relacionadas.
