El domingo España entera observó, con sorpresa y atención, cómo el mapa de nuestro país se teñía de azul tras las elecciones autonómicas y municipales. Menos de 24 horas después, el país se sorprendía con el anuncio de nuevas elecciones, convocadas por el Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para el 23 de julio, sólo mes y medio después de que se celebraran las de este domingo. Ese día, aparte de ver quién será el presidente, también se decidirá quiénes serán los nuevos diputados y senadores. Pero, ¿es un 'chollo' serlo? ¿O realmente es un 'marrón' que no compensa económicamente?

Según el artículo 71.4 de la Constitución Española "los Diputados y Senadores percibirán una asignación que será fijada por las respectivas Cámaras". Y en el Reglamento del Congreso de los Diputados se establece que sus miembros "percibirán una asignación económica que les permita cumplir eficaz y dignamente su función" y que "tendrán igualmente derecho a las ayudas, franquicias e indemnizaciones por gastos que sean indispensables para el cumplimiento de su función". Y es precisamente este punto lo que dispara el sueldo de algunos de los miembros del Congreso.

Según los últimos datos del Portal de Transparencia del Congreso de los Diputados, para el año 2023 la asignación (idéntica de base para todos los Diputados) es de 3.126,89 euros al mes. Pero a esta base se le añaden una serie de complementos en función de si desempeñan algún cargo concreto en el Congreso.

El sueldo 'extra' de algunos diputados

Esos diputados que reciben un 'extra' de sueldo por tener varios cargos son el Presidente del Congreso (Meritxell Batet, y no Pedro Sánchez), que recibe este año 3.421 euros por su cargo como miembro de Mesa, 3.714 por los gastos de representación; y 3.045 por gastos de libre disposición.

También los vicepresidentes y secretarios reciben por los mismos motivos (miembro de Mesa, gastos de representación y gastos de libre disposición) 1.346,50 €, 1.125,23 € y 787,12 €; y 1.051,35 €, 911,08 € y 754,01 €, respectivamente.

Aparte, los portavoces y portavoces adjuntos ganan 1.938,25 y 1.031,15 € los primeros y 1.582,93 € y 736,05 € los segundos por gastos de representación y por gastos de libre disposición. Por último, los presidentes, vicepresidentes, secretarios, portavoces y portavoces adjuntos de comisión reciben un extra de 1.590,37 €, 1.162,76 €, 775,18 €, 1.162,76 € y 775,18 € respectivamente pero sólo por gastos de representación.

Por otro lado, aparte del sueldo base y de las comisiones extras, los miembros del Congreso de los Diputados reciben otras indemnizaciones y ayudas.

Las indemnizaciones tienen una cuantía mensual de 2.008,61 euros para los Diputados de circunscripciones distintas a Madrid y de 958,75 euros para los electos por Madrid. Esta ayuda se da porque "los parlamentarios deben afrontar los gastos que les origine la actividad de la Cámara" y por lo tanto "es una cantidad dedicada, pues, a cubrir gastos y por ello exenta de tributación".

El Congreso también estima diversas ayudas para sus miembros. Entre ellas, ayudas al transporte, que incluye, pago de medios de transporte públicos (a través de reembolso), gastos derivados del aparcamiento en las estaciones de tren y aeropuertos, y el uso del propio automóvil en sus desplazamientos a la Cámara para el cumplimiento de sus funciones parlamentarias, en cuyo caso, y previa justificación, se abona 0,25 euros por kilómetro así como, en su caso, los importes de los peajes de autopistas. La Cámara facilita a cada Diputado que no dispone de vehículo oficial una tarjeta personalizada que permite abonar el servicio de taxi en la ciudad de Madrid. La disponibilidad de dicha tarjeta tiene un límite anual de 3000 euros.

Incluyen también gastos en viajes oficiales (perciben dietas por valor de 150 euros por día en un viaje al extranjero y 120 por viajes dentro de España) y gastos en aparatos que permitan su comunicación (el Congreso facilita a los Diputados un iPad, así como un teléfono móvil que les permitan ejercer su función).

Con todo esto, por ejemplo, una de las personas que más gana dentro del Congreso de los Diputados es la Presidenta, Meritxell Batet, que cobra lo básico por ser diputada y todos los extra de ser la presidenta. También los 2008 correspondientes por ser diputada por Barcelona. Si a esto le sumamos aproximadamente unos 2000 euros de dieta recibe cada mes como mínimo 17.300 euros, a los que habría que añadir el coste de transporte, que depende de su actividad, el valor de los aparatos tecnológicos y el posible consumo que realice de taxis.

El caso de los senadores, muy similar

Hasta aquí era todo lo que ganaba un diputado. Pero los senadores no se quedan lejos. En este caso, la asignación idéntica mensual es de 3.173,83 euros, que se perciben en 14 pagas.

Y como ocurre en el caso de los diputados, en el Senado también tienen sus extras. El artículo 23.1 del Reglamento del Senado recoge que "los Senadores tienen derecho a las "(…) dietas e indemnizaciones por gastos necesarios para el desempeño de su función que se fijen en el Presupuesto del Senado (…)" y "dentro del territorio nacional, (…) a pase de libre circulación en los medios de transporte colectivo que determine la Mesa del Senado o al pago, en su caso, con cargo al Presupuesto de la Cámara, de los gastos de viaje realizados de acuerdo con las normas que la Mesa en cada momento establezca" (artículo 24.1).

Sobre las indemnizaciones, que también se reciben en 14 pagas, ascienden a los 2.037,07 euros para los Senadores de circunscripciones distintas a Madrid y de 971,48 euros para los electos o designados por Madrid. Con este dinero, los parlamentarios deben afrontar los gastos que les origine la actividad de la Cámara.

El resto de beneficios económicos, son muy parecidos a los de los diputados del Congreso. Les pagan los gastos en medios de trasporte colectivos, como avión, tren o bus, siempre que sea para el desempeño de su actividad parlamentaria; los gastos derivados del aparcamiento en las estaciones de tren y aeropuertos; los viajes oficiales en representación del Senado, dentro y fuera de nuestras fronteras y debidamente justificado.

Como los diputados, los senadores pueden gastarse en taxis hasta 3.000 euros cada año; también les pagan 0,25 euros por kilómetro realizado con su coche particular y los peajes de las autopistas.

Así que es cuestión de cada lector juzgar si cobran mucho o poco, aunque la realidad es que comparando con lo que cobran en otros países, no son ni de lejos, los mejor pagados.

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