La Asociación de Facultativos Especialistas de Madrid (AFEM) aprobó el miércoles en asamblea iniciar una serie de movilizaciones entre las que se encuentra la de convocar una huelga indefinida del personal sanitario que comenzaría a finales del mes de noviembre y que se hará oficial en las próximas fechas.
El objetivo de esta asociación es debatir la forma de hacer frente a las recientes decisiones tomadas por la Comunidad de Madrid. Desde AFEM entienden que las medidas anunciadas por el gobierno regional pretenden desmantelar la sanidad pública madrileña y afectarán directamente a la atención sanitaria de cerca de 1,3 millones de ciudadanos y a la situación laboral de unos 8.000 profesionales.
“Los principales perjudicados del desmantelamiento del actual sistema sanitario son los pacientes"
Fátima Brañas, miembro de la asociación, explica que ésta creció en abril-mayo de 2012 “porque necesitábamos tener voz ya que las instituciones existentes no habían tomado partido”. “La situación que la Sanidad española está viviendo es de una grave crisis de gestión más que de privatización”, asegura. Y señala que de lo que se tendría que tratar es de “ahorrar sin perjudicar al paciente”. Los médicos que trabajamos día a día “sabemos dónde hay que recortar para no perjudicar al paciente ni menoscabar la calidad”.
La situación es dramática
Para Pedro González, presidente de la AFEM, “la situación es tan dramática que o hacemos algo, o dentro de unos años no tendremos sanidad pública para nuestros hijos o mayores. Es una situación extremadamente grave, sobre todo porque detrás de todo ello hay intereses económicos más allá del ahorro de costes”.
Estas medidas suponen un profundo paso hacia el desmantelamiento de una Sanidad pública de calidad
Durante la asamblea del miércoles se acordó desde esta asociación manifestar su más absoluto rechazo a las medidas que el Gobierno de Madrid pretende aplicar a los presupuestos sanitarios del próximo año. Y considera que “las medidas tomadas por la comunidad madrileña son injustas y absurdas, pues carecen de fundamento técnico. Y aluden a la experiencia internacional “que demuestra que la privatización de la Sanidad multiplica los gastos y empeora los resultados en salud”.
“Los principales perjudicados del desmantelamiento del actual sistema sanitario son los pacientes, y pacientes somos todos”, así de tajantes se muestran Fátima Brañas y Pedro González. Desde la asociación luchan contra las medidas adoptada por el gobierno regional, que incluyen la privatización total de seis hospitales un 10% de los centros de salud y el desmantelamiento de hospitales emblemáticos como La Princesa o el Carlos III. Hechos que estiman que se han llevado a cabo “con improvisación y oscurantismo, si consultar a los profesionales ni a los ciudadanos afectados”.
Según Pedro González: “El deterioro de nuestra Sanidad lo sufrimos también como usuarios de la Sanidad, por lo que nuestro lema es ‘somos médicos, somos pacientes’. Así nos comprometemos a que nuestras reivindicaciones afecten lo mínimo posible a nuestros pacientes”.
Desde AFEM también manifiestan su preocupación por la situación laboral de muchos facultativos que se verán afectados por traslados o por la no renovación de sus contratos el próximo mes de enero, “porque estas medidas suponen un profundo paso hacia el desmantelamiento de una Sanidad pública de calidad, cuya propietaria es la sociedad en general, no el gobierno regional”.