La anorexia sexual es el deseo sexual inhibido. Este trastorno relacionado con un interés muy bajo o nulo por el sexo también es llamado anafrodisia y su principal característica es la dificultad para llegar al orgasmo que peude incluir también dolor al mantener relaciones sexuales.
La falta de libido sexual suele basarse en un miedo irracional al rechazo por parte de la pareja y cuenta con causas tanto psicológicas como físicas que se reflejan en una dificultad para manifestar deseo sexual o la negación total del propio placer en las relaciones íntimas.
No debemos confundir este problema con la asexualidad, en la que las personas asexuales perciben el sexo como una no-orientación sexual que se caracteriza precisamente por no sentir atracción sexual hacia otras personas. Sin embargo, en la anorexia sexual, el problema radica en la ansiedad que puede suponer la relación sexual en sí.
Las personas que sufren este trastorno rechazarán siempre que les sea posible la posibilidad de mantener relaciones sexuales y si las llevan a cabo, no las disfrutan. Esto hará que la frecuencia en las relaciones se vaya reduciendo y esto puede provocar un problema mayor en la pareja.
La falta de deseo sexual se asocia además con frecuencia a dificultades para experimentar el orgasmo y a dolor durante la actividad sexual, por lo que hablar de esto con la pareja es clave a la hora de tratar de ponerle solución. Las dificultades en la relación y los trastornos del estado de ánimo también son características que se asocian con frecuencia a la anorexia sexual.
Causas de la anorexia sexual
No existe una sola causa que provoque la anorexia sexual y será un profesional el que deba determinar porqué se produce y aportar por lo tanto posibles soluciones a este problema de carácter íntimo.
La mejor recomendación es acudir a un psicólogo que nos ayude a identificar el motivo de nuestro bajo deseo sexual y que vea si es algo puntual o un problema mayor que se extiende en los años. Pero entre las causas más habituales se encuentran:
Bloqueo por trauma. Durante los primeros años, las personas descubren su genitalidad y su sexualidad y empiezan poco a poco a aprender a disfrutar de esto. Pero hay veces que se produce algún tipo de trauma en este proceso que provoca un bloqueo que hace que no se pueda obtener satisfacción durante el sexo. Esa historia que cada uno va creando desde que es un niño, es clave a la hora de desarrollar una salud sexual satisfactoria y sana. En muchas ocasiones puede ser un problema temporal.
Hay casos en los que la anorexia sexual se produce después de haber vivido algún tipo de abuso que puede ser físico o psicológico y provoca una negación del placer. También se puede encontrar la causa en un miedo irracional a contraer enfermedades de transmisión sexual.
Otra de las causas externas puede ser el estrés. Hay momentos puntuales en los que el estrés puede vivir un pico muy alto y en esos días o semanas no hay ningún interés por el sexo.
La rutina dentro de la pareja también puede ser una de las causas de esta bajada en la libido y una buena manera de solucionarlo es hablarlo con la pareja o incluso acudir a terapia de pareja para entender qué es lo que está produciendo esa escasa apetencia sexual. Asimismo, la utilización de fármacos que influyen negativamente en la libido, la disfunción eréctil, la impotencia o la anorgasmia pueden conducir a sufrir esta afectación.
La relación de una persona con su propia autoestima es también una de las causas que puede provocar la falta de deseo sexual. No sentirse bien con su propio cuerpo, una insatisfacción sexual o la falta de conocimiento del cuerpo y de lo que a cada uno da placer, influye de manera clara en el desarrollo de una actividad sexual plena.
Características de la anorexia sexual
Una de las claves para poner fin a un problema puntual de anafrodisia es identificar el problema. Entre las características que pueden hacerte ‘saltar las alarmas’ una de las más claras es la falta de interés en el sexo en cualquiera de sus modalidades. Además, las fantasías o el deseo y pensamiento sexual brillan por su ausencia o son prácticamente nulos y es complicado sentirse cómodo cuando tu pareja se acerca a ti con la intención de mantener un encuentro íntimo contigo.
Además, la excitación está ausente durante las relaciones y no se produce ningún tipo de excitación cuando otra persona se acerca de alguna manera a nosotros con una intención erótica o sexual. Incluso las sensaciones genitales no se notan durante la actividad sexual.
Otros síntomas de la anorexia sexual son la dismorfia corporal o la percepción alterada, exagerada e irracional, del propio cuerpo. También la búsqueda de la soledad, la obsesión por la perfección o el sentimiento de inferioridad pueden hacernos darnos cuenta de que algo no marcha como debería. Estos síntomas persisten durante al menos seis meses y provocan un malestar en la persona que los padece.
Tratamiento
Lo principal es buscar ayuda en un especialista que identifique en primer lugar cuáles son las causas que llevan a la persona a no sentir placer o deseo sexual. La persona afectada tiene que ser consciente de lo que le sucede y debe querer tratarse. Una vez identificada la causa, habrá que redefinir la relación con el cuerpo e ir poco a poco aceptando qué es el placer y cómo conseguirlo, primero a partir de caricias o masajes, por ejemplo, que hagan recuperar las sensaciones placenteras. Se utilizan asimismo técnicas de relajación y respiración para controlar la ansiedad.
El siguiente paso será acercarse a los demás para que ese contacto humano vaya más allá del mero hecho de mantener relaciones sexuales, sino que incluya pequeños gestos como besarse o abrazarse.
Si se tiene pareja, será clave reavivar la llama entre los dos creando un ambiente relajado, cambiando cierta rutinas íntimas y hablando mucho sobre lo que cada uno siente y desea. Existen algunos libros que pueden ayudarnos a entender el problema como Anorexia Sexual: Cómo Vencer El Odio A La Propia Sexualidad, de Patrick Carnes.