El amor es inexplicable cuando llega y nos hace sentir mariposas en el estómago, pero también cuando empieza a esfumarse. En las relaciones de pareja no hay nada escrito y cada persona vive su relación de una manera y puede desenamorarse cuando menos se lo espera, pero es cierto que hay algunas señales que pueden indicar que hay algo que se está rompiendo entre dos personas que han vivido una historia de amor.
Aunque muchas veces nos cuesta asumir que el amor está tocando a su fin, debemos entender que las relaciones no siempre duran para siempre. En las fases del amor podemos pasar de una relación de color de rosa que vaya derivando en otra más rutinaria que finalmente tenga una conclusión. Pero lo importante es entender qué nos está sucediendo, qué sentimos y por qué estamos viviendo un momento de desamor que no siempre puede tener una solución.
No existen normas fijas ni estudios que digan cuándo se termina una relación de pareja, aunque algunos expertos como Helen Fisher han escrito al respecto. Nuestro corazón manda y nadie puede obligar a otro a amar o seguir amando cuando ya no lo siente de verdad. Pero no todo es negativo. Podemos darnos cuenta de que hay algo que falla en la pareja, hablarlo y tratar de solucionarlo para que la relación vuelva a estar al cien por cien o incluso mejor que antes. Si es tu caso, te contamos cuáles son las señales de que algo está fallando. Ponerle solución ya solo depende de vosotros.
Síntomas de que el amor está terminando
Los gestos cariñosos brillan por su ausencia. El amor no es solo algo que se demuestra con palabras, también son importantes los gestos que se tienen con la pareja. Uno de los síntomas que pueden indicar que está a punto de terminar es cuando los gestos de cariño, los abrazos o los piropos entre los miembros de la relación comienzan a escasear. Los gestos espontáneos y los pequeños detalles demuestran complicidad y cariño, por lo que cuando esas manifestaciones brillan por su ausencia puede que haya algo que se haya roto en la relación o que se esté viviendo un momento de hastío o aburrimiento que quizá pueda tener solución.
¿Ya no os reís juntos? Cuando alguien está enamorado se comparten los momentos malos, pero también los buenos. Reírse y tener sentido del humor es un detalle que manifiesta que la relación va viento en popa. Cuando queremos pasar tiempo con la pareja es porque nos sentimos cómodos y esos momentos deben ser de paz y tranquilidad. Si preferimos pasar tiempo con otras personas o siempre estamos con la cara larga cuando estamos con el otro miembro, es que algo va mal.
Una bajada en el deseo sexual. El sexo es importante en una relación sentimental. Está claro que las relaciones evolucionan y no siempre la pasión de los primeros meses continúa durante años y años, pero cuando el deseo sexual va cuesta abajo y sin frenos y se huye de cualquier relación sexual con la pareja, plantéate si estás enamorado de esa persona o, por el contrario, necesitas un poco de aire o romper con ella de la mejor manera posible. Hay momentos en los que la rutina o el estrés laboral o familiar pueden hacer que el sexo disminuya, pero debemos entender por qué nos está pasando eso y si tiene solución posible o no.
Ya no os comunicáis. Hablar del día a día, compartir las preocupaciones y las alegrías y tratar de resolver los conflictos que puedan ir surgiendo es clave para tener una relación sana y feliz. Cuando la comunicación no existe o cuando os sentáis en el sofá y no tenéis nada de lo que hablar, pregúntate qué es lo que sientes porque algo no marcha como debería.
En este punto pueden además surgir discusiones por cosas pequeñas que se van enquistando y que no terminan de resolverse porque ‘pasamos’ de hablar. Tal vez estás viviendo un mal momento, pero si no lo hablas con la otra persona, él pensará que todo se ha terminado e incluso se puede culpar de la situación. La comunicación es fundamental en la pareja, si falla, falla todo.
No hay proyectos en común. Una pareja debe ser independiente y tener sus momentos de soledad o con otras personas que no sean los dos miembros de la relación, pero cuando esto es lo único que se vive, el amor puede estar en fase de 'standby'. Una pareja feliz tiene proyectos en común, ya sea un viaje, un plan para las próximas vacaciones o irse a vivir juntos. Tener planes en común, ya sean a corto o largo plazo, es una de las cosas que una pareja debe de hacer para compartir momentos de felicidad y ocio juntos.
No ves atractivo en el otro. Como decíamos, la pasión va cambiando con el paso de los años, pero cuando amas a otra persona, le ves atractivo y tienes ganas de estar con él en todos los aspectos. Cuando empiezas a notar que no sientes ninguna atracción por el otro, ni física ni emocional, date cuenta de que algo va mal.
Piensas en la infidelidad. Otra señal de que el amor puede estar desmoronándose es el simple hecho de empezar a pensar en ser infiel a la otra persona cuando quizá nunca se te había pasado por la cabeza. No es necesario llegar a cometer la deslealtad, simplemente pensarlo con frecuencia o tener la necesidad de los halagos o comentarios de otra persona ajena a la pareja, puede ser un síntoma inequívoco de que algo no está bien.
Los defectos son mayores. Cuando esas pequeñas cosas que te hacían gracia de la otra persona, esas manías o pequeños defectos que llevabas bien comienzan a ser un problema y ya ‘no los soportas’ y todo lo que hace el otro te resulta irritante, haz que tu alarma salte. No quiere decir que tengamos que aguantar todo lo que hace el otro, pero cuando son cosas sin importancia y que se pueden pasar por alto y de golpe y porrazo se convierten en algo insoportable, es que ya no sientes lo mismo por esa persona. La crítica constructiva está fenomenal, pero criticar o reprochar todo al otro puede terminar en una ruptura.