Después de varias semanas intentando fichar un sustituto para Carlo Ancelotti, el Paris Saint-Germain (PSG) al fin lo tiene. Se trata del antiguo seleccionador francés Laurent Blanc, quien hace un par de semanas fue colocado por algunas medios en la Real Sociedad. De esta manera, el Real Madrid tiene vía libre para fichar al italiano, si bien falta por saber cuánto dinero pagará finalmente Florentino Pérez.
El acuerdo con Blanc se conoció a través el canal 'BeIN SPORT', propiedad del dueño del club parisino y después de que el diario 'L'Équipe' revelara que Jean-Pierre Bernès, el agente del entrenador del campeón de la Liga francesa en 2009 con el Girondins de Burdeos, se reunió el jueves con Leonardo, director deportivo del club parisino.
El acuerdo con el club del que es propietario el jeque qatarí Nasser al-Khelaïf es por dos próximas temporadas. De este modo se desbloquea la vía para la salida del actual entrenador, Carlo Ancelotti, hacia el Real Madrid y se descarta que Arsène Wenger tuviera firmado un acuerdo para dirigir al PSG a partir de la próxima temporada, precisamente cuando finaliza su contrato con el Arsenal.
Blanc, de 47 años, anunció hace un año que dejaba el banquillo de la selección francesa de fútbol después de dos años en el cargo y tras la eliminación de los 'bleus' en cuartos de final de la Eurocopa, donde algunos de los internacionales franceses protagonizaron enfrentamientos en el vestuario y con la prensa.
El seleccionador había cumplido el objetivo de clasificar a Francia para cuartos de final de la Eurocopa, fijado después del fracaso de los internacionales franceses en el pasado Mundial de Sudáfrica, donde cayeron eliminados en la fase de grupos y protagonizaron un motín que le costó el puesto a entrenador, Raymond Domenech.
Aquel escándalo, sobre el que se pronunció incluso el entonces presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, conllevó una sanción de 18 partidos sin jugar con la selección nacional para Nicolas Anelka, cinco a Patrice Evra, tres a Franck Ribéry y uno a Jérémy Toulalan.
En los casi dos años que Blanc dirigió a la selección gala, los franceses lograron llegar hasta el tercer partido de la fase de grupos de la Eurocopa con una histórica serie de 21 partidos seguidos sin perder.