El Gobierno cree que tendrá que sustituir a Magdalena Álvarez en la vicepresidencia del Banco Europeo de Inversiones. Y ya se barajan nombres, entre los que suena con fuerza el exministro de Trabajo, Valeriano Gómez.
Al confirmarse la imputación de la exconsejera de la Junta y exministra de Fomento en el caso de los ERE de Andalucía, en el Ministerio de Economía consideran que el BEI no tardará en alegar que no puede mantener a un alto cargo que se encuentra imputado debido a sus estatutos.
Economía no tiene intención de sustituir a Álvarez, pero ve muy probable que en algún momento el BEI mueva ficha. Y para ese hipotético caso en el que se vea obligado a buscar un reemplazo, se contempla con muy buenos ojos la opción de Valeriano Gómez, ahora portavoz de Economía del PSOE en el Congreso.
Y las razones son muchas. Con el nombramiento de Gómez como vicepresidente del BEI, se respetaría que el cargo lo tiene adjudicado el PSOE y que el perfil que lo ocupe sea de la talla de un exministro. Aunque la expertise de Valeriano reside en el campo de la economía laboral, se le considera un técnico muy capaz y un político dialogante y con cintura. Pese al normal trabajo de oposición, las relaciones entre Luis de Guindos y Valeriano Gómez han sido muy fluidas, en especial en todo a lo que se refiere al complicado rescate bancario.
Además, se trata de un puesto de cierta importancia en estos momentos en los que el Gobierno quiere potenciar el uso del BEI para que el crédito llegue a pymes, autónomos y empresas de mediana capitalización.
La misión del BEI
En 2012, el Banco Europeo de Inversiones prestó 52.000 millones de euros para proyectos y sus prioridades son las empresas de menor tamaño, el desarrollo regional, la innovación, las infraestructuras y la energía.
La idea del Ejecutivo de Rajoy era que se inyectase más capital al BEI, apalancarlo y así movilizar hasta 100.000 millones de euros en créditos. Sin embargo, aunque existe el propósito de fortalecer al BEI, este proyecto por el momento no ha prosperado tal y como esperaba el Gobierno, y las cantidades que pondrán los países socios serán voluntarias, lo que asegura que los recursos disponibles sean bastante más limitados de lo previsto.
En esta línea, el Consejo de Dirección del Banco Europeo de Inversiones aprobó esta semana un préstamo por valor de 4.310 millones para pymes y empresas de capitalización media en la UE, de los cuales 1.500 millones se destinarán a proyectos en España.