La crisis derivada de la pandemia está castigando a todos los mercados europeos de automóviles, aunque España es el que más está sufriendo con la mayor caída de matriculaciones de la Unión Europea sólo superada por Croacia, aunque este es un mercado de volumen muy reducido. Así, las matriculaciones de turismos en el conjunto del mercado europeo se situaron en 5,1 millones de unidades durante el primer semestre de este año, lo que supone un retroceso del 39,5% en comparación con el mismo periodo de 2019 a causa fundamentalmente de la pandemia del coronavirus.
Según datos de la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA), todos los países pertenecientes a la Unión Europea registraron unas matriculaciones inferiores a las del año pasado, sufriendo de manera especial los mercados croata y español, que han experimentado un retroceso del 54,4% y el 50,9%, respectivamente, hasta 17.423 unidades y 339.853 unidades. Datos que hacen que España sea el país que peores cifras presenta en el primer semestre de entre los grandes mercados europeos, pues las cifras de Croacia representan un porcentaje muy bajo respecto a los principales países europeos.
Solo en el mes de junio, el mercado automovilístico europeo se contrajo un 22,3%, con 1,13 millones de unidades, de los cuales 949.722 vehículos fueron vendidos en países pertenecientes a la Unión Europea.
En cuanto a marcas, Volkswagen volvió a situarse a la cabeza del mercado europeo, matriculando 497.691 unidades en los seis primeros meses de este 2020, un 38,1% menos que el pasado año. La segunda marca fue Renault, con 335.258 unidades, un 38,9% menos. Cierran la lista de las cinco marcas más vendidas en Europa en el primer semestre Peugeot, con 290.151 unidades, un 39,1% menos; Skoda, con 243.020 unidades, un 28,8% menos, y Mercedes-Benz, con 242.715 unidades, un 28,8% menos.
Solo en junio, las marcas más vendidas también fueron Volkswagen (102.417 unidades, -28,3%), Renault (102.130 unidades, -14,7%), Peugeot (68.174 unidades, -15,4%), Mercedes-Benz (53.278 unidades, -6,1%) y Skoda (51.414 unidades, -12,4%).
China, peligro para las fábricas españolas
Si el mercado de automóviles ha sufrido un notable descenso en esta primera mitad del año, las fábricas españolas se enfrentan también a un futuro complicado, con bajada de producción hasta junio provocada por la crisis sanitaria y la amenaza de China y sus coches eléctricos como señala un estudio de la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas). Según el mismo, las medidas encaminadas a reactivar la demanda de vehículos podrían trasladarse en su "gran mayoría" a un incremento de importaciones de China –un mercado líder en ventas de coches eléctricos–, lo cual no resolvería el problema al que se enfrenta el sector automovilístico español en la actualidad.
Es una de las conclusiones que se incluyen dentro del último 'Cuaderno de Información Económica' editado por la Fundación de Cajas de Ahorro, donde María José Moral, profesora titular de Economía Aplicada en la UNED, analiza el nuevo contexto internacional, que exige abordar todos los retos pendientes si se quiere que la automoción pueda afrontar con garantías el futuro.
A su juicio, los fabricantes de vehículos en España deberán realizar un esfuerzo importante en la sustitución de su producción hacia modelos de automóviles más limpios que puedan captar a más consumidores para así superar la crisis económica provocada por el coronavirus y recuperar la senda de aumento de las exportaciones que se perdió a partir de 2016.
En este sentido, la autora del artículo, recogido por Europa Press, recuerda que el hundimiento de las exportaciones españolas de vehículos a partir del mes de marzo por la crisis del coronavirus ya viene precedido por un periodo de leves caídas registrado a partir de 2016 debido a, entre otros factores, el estancamiento de los mercados europeos de destino, pero fundamentalmente al 'mix' de productos producidos en España, en el que los modelos de diésel representan una parte sustancial y los coches de tecnologías alternativas son "muy marginales", representando apenas el 7% de las exportaciones en 2020.