Pedro Rollán, vicepresidente de la Comunidad de Madrid, ha asegurado este martes que no va a "legislar para garantizar el exterminio" de los vehículos de transporte con conductor (VTC), por lo que no da "por bueno" una regulación que fije una precontración temporal, ya que esto es una "línea roja".
El representante del Gobierno madrileño ha señalado que no están dispuestos a abordar "cuestiones que lejos de mejorar el entorno generarían un conflicto aún mayor". En la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Consejo de Gobierno, el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Pedro Rollán, se ha referido así a la propuesta que los taxistas, que hoy cumplen su noveno día de huelga indefinida, están ultimando para volver a negociar con el Ejecutivo autonómico.
Por su parte, el taxi sigue de huelga. Varios cientos de los taxistas que secundan los paros indefinidos en Madrid y se concentran este mediodía ante la sede del PP, en la calle Génova. Su reivindicación se basa en la pretensión de que sea regulado el modo de operar de los vehículos de alquiler con conductor (VTC) con gritos en los que piden al presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, que les escuche.
Entre 1.500 y 2.000
Como ya hicieran este lunes, los taxistas, entre 1.500 y 2.000, permanecen concentrados ante la sede del PP desde las 11:00 horas después de llegar desde diversos puntos de la ciudad y especialmente desde la Avenida de América, donde a primera hora de hoy se reunieron frente a la sede del sindicato UGT, con el presidente de la Federación Profesional del Taxi de Madrid, Julio Sanz.
En el interior de la sede del PP -cuya puerta principal permanece cerrada y vigilada por agentes antidisturbios de la Policía Nacional- se celebra hoy un comité de dirección y hay prevista una rueda de prensa después de las 13:30 horas.
Durante su recorrido desde la Avenida de América hasta la sede del PP, los taxistas, vigilados de cerca por la Policía, han generado cortes parciales en las calles Príncipe de Vergara, Velázquez y Juan Bravo, a pesar de que los agentes de la Policía han evitado que su marcha ocupara todo el ancho de la calzada de estas calles.
Los taxistas han detenido su desfile en dos ocasiones, la primera ante la Embajada de Estados Unidos, en la calle Serrano, para proferir gritos y hacer ruido, y la segunda al pasar por la plaza Margaret Thatcher, en Colón, donde siete personas del sector del taxi permanecen en huelga de hambre.
