Ferrovial, a través de su filial de servicios Amey, y ACS, gracias a su participada Leighton, se han adjudicado un contrato de mantenimiento de carreteras en Australia por un importe estimado de 93,5 millones de euros.
El contrato, adjudicado por el Departamento de Transporte y Carreteras del Estado de Queensland, comprende los trabajos de mejora y mantenimiento de más de 1.000 kilómetros de red, incluyendo más de 650 kilómetros de carreteras estatales y nacionales.
Según ha indicado este lunes Amey en un comunicado, el proyecto, que desarrollará en una "joint venture" junto a las compañías australianas Leighton y Boral Construction Materials, es el primero importante que gana la compañía en Australia, donde busca incrementar su presencia.
El alcance del contrato se extiende a la gestión de los activos, al diseño de los planes de mejora y a los trabajos de rehabilitación de la red. Las actuaciones de mantenimiento comenzarán a finales de noviembre, mientras que el resto del proyecto se extenderá desde enero de 2014 hasta junio de 2018. El contrato se enmarca dentro de un programa de gestión de activos viarios para un plazo de cinco años en la región de la costa del sudeste de Queensland.
La red se extiende desde el sur del distrito de metro de Brisbane a la frontera con Nuevo Gales del Sur e incluye la Costa de Oro, donde se celebrarán los Juegos de la Commonwealth en 2018. Según ha señalado el consejero delegado de Amey, Mel Ewell, la compañía busca incrementar su presencia y cartera en el exterior gracias a la gestión de activos.
De hecho, Amey tiene el foco puesto en Oriente Medio, así como Australia y otros países en los que se presenten oportunidades de negocio. Con la reestructuración de su esquema organizativo, Ferrovial Servicios espera incrementar un 30%, hasta cerca de 4.000 millones de euros, sus ventas para 2014, según señaló recientemente su consejero delegado, Santiago Olivares.
Para ello, la compañía estará atenta a nuevas compras en Estados Unidos, y a los nuevos contratos que puedan surgir en Reino Unido y España, donde ven más recorrido en la integración de servicios para las ciudades, sin dejar de lado las oportunidades que puedan presentarse en Oriente Medio, en Perú y en Australia, aunque en una fase más tardía.
