El Gobierno se resigna a aceptar la cruda realidad, por mucho que ésta le rompa sus planes para prometer al electorado que el recibo de la luz bajará durante 2005.
Hasta ahora, el ministro de Industria y Energía, José Manuel Soria, había mantenido que la luz bajaría este año. El gesto de bajar los peajes (costes regulados) aprovechando el superávit del sistema eléctrico para conseguir una rebaja del recibo del 2,2% se va a quedar en eso, en un gesto en plena precampaña para las elecciones generales de otoño. Porque la luz ha subido un 11,4% hasta julio y mantendrá esa tendencia durante lo que resta de año.
El propio ministro, en una entrevista con Europa Press, ha reconocido que se conforma con que “cuando acabe el año tengamos un comportamiento similar a lo que fue 2014”. Y, según el INE, el pasado año, el recibo de la luz se encareció un 4,4%.
El ministro se conforma con acabar este año como 2014, cuando el recibo de la luz subió un 4,4% según los datos oficiales del INE
Ésa es la meta del ministro, según se desprende de esta entrevista. Una meta que, por otra parte, estarían dispuestos a ‘firmar’ los consumidores, a la vista del subidón que se ha acumulado ya en los siete primeros meses del año y a que el precio medio del mercado mayorista de electricidad, que sirve de referencia para fijar el 40% del recibo, está en máximos anuales (en torno a 60 euros el megavatio/hora).
“Lo que hay este año es una realidad: las condiciones meteorológicas no están favoreciendo una mayor generación de renovables [su entrada provoca que el precio mayorista baje]”, ya que “hay poca eólica y poca solar”. Si a esto le unimos una demanda de verano desconocida desde hace “varios años”, las subidas de esta parte del recibo están garantizadas, ha señalado el ministro.
Y para compensar ya no se puede acudir, antes de finales de año, a otra bajada de peajes, dado que “el colchón que hay de 250 millones de euros [superávit del sistema] es el que ya se ha utilizado [para la bajada del 1 de agosto]. Sólo nos queda, considera el ministro, esperar a “ver cómo van evolucionando los primeros meses los ingresos y costes del sistema”.
La ola de calor no da tregua, los aires acondicionados a tope, la demanda en máximos y el carbón marcando precios mayoristas un 23,5% más altos
No le falta razón al ministro, que tira la toalla y se resigna a afrontar importantes subidas en los próximos meses. El tirón de la demanda por la ola de calor (especialmente por los aires acondicionados) y la recuperación económica y la entrada en el mix del carbón y el gas, las tecnologías que marcan los precios más caros, por la caída de las renovables (poco viento y muy cálido –sube por encima del alcance de los molinos-, poca aportación de la energía solar y baja hidraulicidad), han provocado que el precio del MW/h esté hoy un 23,5% por encima del de hace un año.
Soria afirma que se mantendrá “vigilante y velar para que las reglas de competencia se cumplan y no haya ningún tipo de distorsión que pueda afectar a los precios”, en referencia a las fuertes subidas de los dos últimos meses.
