Samsung ha lanzado en España una solución para los nuevos Samsung Galaxy S8 y S8+ que transforma el móvil en un ordenador y ofrecer al usuario una experiencia como la de un puesto de escritorio. De esta forma, el usuario puede conectar su smartphone a un monitor, un teclado y un ratón, y editar documentos de Office, retocar fotos con Adobe, consultar el correo electrónico o navegar por internet como lo haría desde cualquier equipo de sobremesa.
La solución, bautizada como DeX consiste en una pequeña estación, más pequeña que una pelota de tenis, a la que se inserta el teléfono móvil. Esta, a su vez, conecta el móvil con un monitor compatible con HDMI y con cualquier ratón y teclado, ya sea bluetooth o USB.
La estación incluye un ventilador para enfriar el dispositivo y carga rápida para que no haya problemas de batería. Además, los mensajes cortos o las llamadas pueden seguir realizándose o recibiéndose normalmente, aunque el teléfono esté conectado a la estación.
"La tendencia está en lanzar soluciones que liberen a los usuarios de tener que transportar consigo un sinfín de dispositivos y que les permitan trabajar eficazmente y acceder a contenidos digitales allí donde estén. Teniendo en cuenta que el smartphone es la principal herramienta de trabajo para muchos profesionales, Samsung DeX ofrece la solución ideal para convertir cualquier lugar en un puesto de trabajo al uso”, declara Luis de la Peña, Head of Marketing de IM de Samsung en España.
Se trata de una solución que acerca más lo que muchos expertos llevan tiempo augurando: el futuro es que los teléfonos móviles se conviertan en ordenadores al uso. Sólo necesitarán una pantalla, nada más.
