Telefónica ha provisionado 856 millones de euros en su ejercicio 2016 por la ampliación del programa de bajas incentivas al año 2018 que está aplicando en España. En total la operadora, que ha presentado hoy sus resultados anuales, ha provisionado 1.290 millones de euros (1.250 millones de euros en gastos por operaciones y 40 millones de euros en otros gastos e ingresos netos). "Dichas provisiones no han tenido impacto en la generación de caja del trimestre y están enmarcadas en el proceso de transformación y simplificación de la Compañía, que permitirá generar ahorros adicionales en gastos y eficiencias con impacto positivo en la generación de caja", indica Telefónica en la comunicación de sus resultados enviada a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
La aplicación de estos programas de bajas incentivadas es otra de las medidas que el grupo está tomando para reducir su endeudamiento, cercano a los 50.000 millones de euros al término de septiembre de 2016 y que se ha reducido a 48.595 millones de euros en diciembre de 2016. La operadora sostiene que el plan de bajas incentivadas que está aplicando en España "generará un impacto positivo en la generación de caja desde 2018 y un ahorro anual promedio en gastos directos de aproximadamente 100 millones de euros a partir de 2019".
Telefónica ha impulsado en los últimos meses sus programas de bajas incentivadas para la plantilla en España ampliando hasta 2018 el Plan de Suspensión Individual de contratos (PSI), y acordando otro que se cerró el pasado día 17 de febrero para empleados de los centros corporativos.
La plantilla del grupo cayó por vez primera el pasado año por debajo de los 30.000 empleos en el país. La aprobación del PSI incluido en el convenio colectivo 2015-2017 para los trabajadores de Telefónica de España, Telefónica Móviles España y Telefónica Soluciones es lo que ha propiciado una reducción tan rápida y elevada de la plantilla. En el plan se ofrece el 68% del salario al mes para los empleados con una edad mínima de 53 años y una antigüedad de 15 años, hasta que cumplan 65 años. En marzo de 2016 Telefónica empleaba en España a 31.118 personas, y en septiembre a 28.522.
El PSI se ha extendido hasta 2018 tras el acuerdo entre empresa y sindicatos para prorrogar el convenio. Los empleados nacidos en 1965 y con una antigüedad mínima de 15 años en la compañía, que cumplirán 53 años a lo largo del próximo año, podrán acogerse al plan. La baja se producirá en el mes en que cumplan dicha edad.
El grupo acordó con los sindicatos en la negociación de la ampliación del PSI hasta 2018 un programa de bajas incentivadas para empleados con una antigüedad mínima de cinco años y menores de 55 años que no pudieran acogerse a dicho plan. La compañía ofrece a este colectivo 45 días de salario por año de servicio efectivo, con un máximo de tres anualidades y media.
Además, el pasado 17 de febrero, la compañía dio por finalizado otro programa de bajas incentivadas dirigido al personal de los centros corporativos presentado en enero. Telefónica ha ofrecido una retribución de hasta el 54% del sueldo bruto al mes durante 10 años para empleados con una edad máxima de 55 años y una antigüedad de 10 años. Para el personal que lleva trabajando menos de una década, Telefónica ofrecía una indemnización de 60 días por año trabajado.
En 2015 el grupo provisionó 2.900 millones de euros para atender el coste del PSI previsto hasta 2017.
Los ingresos de Telefónica en el pasado ejercicio ascendieron a 52.036 millones de euros, +1,3% interanual orgánico (-5,2% reportado). Telefónica España representa el 24,4% de los ingresos consolidados de enero-diciembre, seguido de T. Hispanoamérica (24,2%), T. Brasil (21,3%), T. Deutschland (14,4%) y T. UK (13,2%).
La multinacional presidida por José María Álvarez-Pallete ha informado que el beneficio neto consolidado del trimestre asciende a 1.233 millones de euros en términos subyacentes (145 millones reportado) y se multiplica por 2,5 veces frente al mismo periodo del año anterior, mientras que en enero-diciembre asciende a 4.038 millones de euros (2.369 millones reportado) y aumenta un 4,8% interanual.
La deuda neta financiera se sitúa en 48.595 millones de euros a diciembre de 2016 y se reduce en 998 millones de euros, en el cuarto trimestre. Telefónica explica que la reducción de deuda se ha hecho gracias a: la generación de caja libre por importe de 2.055 millones de euros y las desinversiones financieras netas por 287 millones de euros, principalmente asociadas a la venta de Telefé.